En un proceso que tuvo lugar desde el 27 de julio hasta el 25 de agosto de este año, 33 exmiembros del Bloque Oriental de las antiguas FARC brindaron información a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) sobre 172 casos de secuestros ocurridos en diversas regiones de Colombia. Los excombatientes comparecieron ante los magistrados, el Ministerio Público y 252 víctimas reconocidas junto a sus representantes legales. Las audiencias inicialmente abordaron la historia de los comparecientes y el funcionamiento general del Bloque Oriental, para luego enfocarse en los secuestros, que en muchos casos llevaron a desapariciones forzadas, violencia sexual y desplazamiento.

Los exguerrilleros describieron la coordinación de múltiples frentes para llevar a cabo secuestros en diversas ubicaciones, incluso en zonas urbanas como Cundinamarca y Bogotá, después de tomas guerrilleras. También admitieron la existencia de un campamento de secuestrados en la región de Sumapaz, donde albergaban a entre 20 y 30 cautivos de distintos frentes. Los excombatientes reconocieron la gravedad de sus acciones, pidieron perdón a las víctimas y sus familias, y proporcionaron detalles, incluyendo mapas dibujados a mano, sobre las condiciones y rutas de traslado de los secuestrados.

Estas declaraciones se integrarán en el expediente de la investigación y se cotejarán con otras fuentes de información. El siguiente paso en el proceso será la realización de audiencias de observaciones por parte de las víctimas.