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- Sofía Petro entrevista a una de las víctimas de la Escombrera, el gran crimen de la era Uribe en Medellín
Por: Sofía Petro Entre los días 16 y 17 de octubre del 2002, con el aval del gobierno de Alvaro Uribe Vélez y su entonces ministra de defensa, Marta Lucía Ramírez, se llevó a cabo en plena Comuna 13 de Medellín lo que se conoce como la Operación Orión, una acción conjunta entre las fuerzas militares y paramilitares del Bloque Cacique Nutibara. La excusa de la Seguridad Democrática fue retomar este sector que según ellos estaba en pleno control de las FARC. El saldo fue aterrador: 71 personas asesinadas, 12 personas torturadas, y 92 desapariciones. Esto al menos dicen las cuentas oficiales porque las extraoficiales hablan de 502 cuerpos. Muchos de estos cuerpos se escondían en la Escombrera. Para Uribe este lugar ubicado en la Comuna 13 -hoy convertido, gracias a Fico Gutiérrez, en un lugar de turismo, formaba parte de algún “delirio mamerto”. La Escombrera, para él, nunca existió. Sin embargo, a finales del 2024, se lograron sacar de allí cuerpos sin identificar que contradicen la versión de Alvaro Uribe y que él pretendía hacerla pasar como la versión oficial. Para desentrañar un pasado que tiene encima 22 años de olvido, Sofía Petro entrevistó a Luz Helena Galeano, una sobreviviente de la Operación Orión. Al ver que en su entorno desaparecieron hijos, hijas, esposas, trabajadores, simples vecinos, decidió remangarse y crear una ONG llamada Mujeres caminando por la verdad que desde hace dos décadas está reclamando por los seres amados que desaparecieron. Pero todo fue oídos sordos por parte de las instituciones. Pero gracias a la JEP y su indagación en la Escombrera han podido encontrar restos humanos en lo que parece ser la punta del Iceberg de otro capítulo de horror cometido en tiempos de Uribe. Esta es la sentida entrevista a Luz Helena Galeano.
- La improbable posibilidad de que Donald Trump saque a patadas a Maduro de Venezuela
Por: Redacción Pares Este fin de semana, desde Cúcuta, el ex presidente Alvaro Uribe pidió como salida a la crisis que vive Venezuela y sus institituciones una intervención militar. Una lluvia de críticas cayó sobre él. Basta con revisar algunas de las páginas de la historia para ver la sangre que ha corrido en el mundo cuando se ha implementado esta medida. Sobre todo cuando Estados Unidos es el que ha tenido el bastón de mando para hacerlo. Una de las razones por las que la derecha latinoamericana estaba volcada en las pasadas elecciones norteamericanas a favor de Donald Trump era precisamente por lo que parecía ser una postura firme contra la dictadura de Nicolás Maduro. En la realidad esto no es así. Desde hace unos años se ha venido filtrando información desde los círculos más cercanos a Trump sobre su admiración por los hombres más duros que están en el poder. Putin es uno de ellos. Maduro es otro que está en su llavero. Ya se sabe el desprecio que siente el magnate por la democracia. Ante la posesión de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela el pasado 10 de enero que ha generado todo tipo de rechazo entre los líderes del mundo, Trump guardó silencio hasta las primeras horas del sábado. Después de que la confusión sobre la situación de María Corina Machado se tomó las redes -algunos decían que había sido secuestrada por el régimen, otros afirmaban que se trataba de una fake news- Trump salió con este mensaje: “La activista por la democracia venezolana, María Corina Machado y el presidente electo Edmundo González, están expresando pacíficamente la voluntad del pueblo venezolano” y exigió se le respetaran sus derechos. Pero ya. No dijo más. Para algunos, sobre todo para los que esperan una intervención armada en Venezuela como es el caso del expresidente Uribe, esto sonó a demasiado poco. En Venezuela se han venido presentando casos cada vez más preocupantes de detenciones de líderes de la sociedad civil. La razón que esgrimió el presidente de los colombianos Gustavo Petro para no asistir a la posesión de Maduro fue la detención arbitraria de Carlos Correa, director de Espacio Público, ex coordinador de la ONG Provea quien fue interceptado el pasado martes por agentes del estado. Ante esto Trump guarda un silencio que se vuelve denso. En entrevista a la DW Laura Cristina Dib, directora del programa para Venezuela de la organización de derechos humanos estadounidense WOLA, afirma que ellos tampoco tienen seguro cual será la postura de Trump con Venezuela después del 20 de enero "Se ha referido a Venezuela como una dictadura, pero no ha habido mayor análisis ni pronunciamientos en torno a la jornada electoral del 28 de julio y la toma de posesión del diez de enero. En ese sentido, el silencio también dice mucho, porque Trump podría estar dejando la puerta abierta para una aproximación que le permita llegar a acuerdos con Maduro, ilegítimamente en el poder". Vale la pena recordar que cuando Trump ganó las elecciones en noviembre del 2024 Nicolás Maduro lo felicitó públicamente e incluso se animó a hablar de que Venezuela y Estados Unidos estarían listos para iniciar una nueva etapa en sus relaciones. La esperanza que le queda a los que creen que Trump tomará medidas más efectivas que las que tomó en su primer mandato contra el régimen, la de que se llamó “La máxima presión” estriba en el nombramiento como su secretario de estado de un tipo de línea dura como Marcos Rubio. Pero Rubio es una excepción. Dentro del equipo con el que entrará a gobernar, Trump tiene gente de línea más suave con Venezuela con la que intentará un diálogo. La postura de Trump ante los últimos hechos ocurridos en Caracas deja claro que ante el tema Venezuela está “tibio” algo que precisamente no caracteriza a un presidente que se posesionará habiendo sido condenado por su comportamiento contra una mujer. En este momento Venezuela no está entre las primeras páginas de su agenda. Por ahora le preocupa más darle palo a la administración Biden por los desbordados incendios en California. Uribe se quedará esperando una intervención militar gringa.
- Negar que la Escombrera fuera una fosa común de los paramilitares: otro de los pecados de Uribe
Por: Redacción Pares El 27 de diciembre del 2024 el país no salía de su asombro ante los hallazgos que hacía la JEP en el sitio conocido como la Escombrera. Se habían encontrado tres cuerpos en este lugar. Durante más de veinte años, después de la Operación Orion, ocurrida durante el gobierno de Alvaro Uribe Vélez, en donde las Fuerzas Militares, al mando de la entonces ministra de defensa Marta Lucía Ramírez, y paramilitares le quitaron el control a las guerrillas a la Comuna 13 de Medellín dejando decenas de muertos, torturados y desaparecidos entre la población civil, se ha denunciado que la Escombrera es una fosa común. Que allá fueron arrojados los cuerpos de muchos de los desaparecidos que dejó la Operación Orion. Veintidos años después la JEP ha podido comprobar que esto es cierto. A finales de diciembre, cuando se conoció que se encontraron restos de dos personas que posiblemente sean desaparecidos de esa Operación, el presidente Uribe, como es costumbre, reaccionó atacando. Primero se inventó un nombre extrañísimo para desligitimar a la JEP y a la gente que apoya el esclarecimiento de la verdad histórica en el país: los llamó Petro-Santistas. En otra de sus esclarecedoras columnas, Cecilia Tascón se preguntaba ¿Qué tienen que ver Petro y Santos si ambos se desprecian? Sólo tienen en común el odio que les tiene Uribe. El expresidente en su comunicado a la JEP afirmó que antes de la Operación Orion -que aún sigue justificando- la Comuna 13 era un infierno en donde los guerrilleros mandaban y que si habían sido arrojados muertos en la Escombrera fue por culpa de la guerrilla y no por la Operación que realizó su gobierno. Sacó pecho afirmando que durante Orion se logró la captura de 23 cabecillas y 243 criminales. Incluso llegó a afirmar que Orión logró que la Comuna 13 se convirtiera en un sitio turístico dedicado al deporte y al arte. Esta nueva patada de ahogado de Uribe ante lo que es la verdad contradice declaraciones de Don Berna, jefe máximo del Bloque Cacique Nutibara de las Autodefensas Unidas de Colombia, quien afirmó en declaraciones públicas que el ejercía control desde la Escombrera y que allí interrogó a personas, torturó, ejecutó y arrojó en este lugar. Los cuerpos eran cubiertos por los deshechos que han acompañado el sitio. Estas declaraciones de paramilitares como Don Berna o Enrique Aguilar se dieron en el 2012, como bien recuerda en su columna Cecilia Tascón, mucho antes que el denominado “Petrosantismo” estuviera en el poder. Según el Centro de Memoria Histórica la Operación Orión, en los cuatro días que duró, dejó un saldo de seiscientas víctimas directas entre desplazados, heridos, desaparecidos, heridos y muertos. Fueron 75 los muertos y 105 los desaparecidos en esa orgía de sangre perpetrada por los paramilitares. En los ocho años que duró Uribe en el poder se encargó de atacar con todo lo que tenía a la mano a los periodistas o a la sociedad civil que escuchaba las voces de las víctimas en la Comuna 13 quienes señalaban impotentes la fosa común que se había convertido, después de la Operación Orión, la Escombrera. Es cierto que la violencia, desde los años ochenta, ha afectado a los cerca de los 280 barrios que conforman la Comuna 13. La ausencia del Estado permitió el surgimiento de grupos armados, pandillas y hasta grupos de lo que se denomina de manera perversa “limpieza social”. A finales de los años noventa ya se enfrentaban abiertamente grupos paramilitares contra células urbanas de las FARC y el ELN. Los paramilitares, en su paranoia, empezaron a asesinar a todo lo que les oliera a guerrilla, a comunista. Los cuerpos, como lo ha señalado Verdad Abierta, eran enterrados en tres lugares, La Escombrera, el barrio la Divisa, y el Alto de la Virgen. Dos meses después de que Uribe llegara a la presidencia se realizó la Operación Orión, que además del saldo de víctimas que relatamos anteriormente, provocó el desplazamientos de 1.200 personas. Así el expresidente siga tratándose como un Pacificador, hay que recordarle que los paramilitares mandaron en la Comuna 13 hasta bien entrado el 2003 cuando deciden acogerse a Justicia y Paz y mientras mandaron lo hicieron con impunidad, ellos se entronizaron gracias a una operación gestada por el gobierno Uribe. Hasta el 2010 se recibieron 72 denuncias de desapariciones que habrían ocurrido en la Escombrera, durante los años en los que Don Berna era la ley. El pasado 10 de enero la JEP logró encontrar otros dos cuerpos más en el lugar. Lejos de algún tipo de autocrítica Uribe aplica uno de los mantras de Roy Cohn, el temible abogado que formó a Donald Trump: Ante la verdad nunca retrocede, así todo te incrimine niegalo hasta el final. La mejor defensa es un buen ataque.
- Marlin Salas: La voz de las raíces ancestrales
Por: Nathaly Paez y Catalina Neva Vivir en una sociedad dividida y que carece de respeto a su prójimo fue lo que impulsó a Marlin a escribir sobre paz; pues desde joven se ha preocupado por los lazos sociales que se desvanecen con la violencia. Ella misma ha sido víctima del conflicto dentro su hogar y fuera de él. De hecho, debido a su liderazgo estas agresiones se han incrementado y, aun así, Marlin se ha negado a abandonar su labor. Por eso, lucha por la transformación de situaciones de injusticia de las mujeres negras, quienes han sido desplazadas, invisibilizadas y agredidas. Aquí la historia: Marlin Salas, con 28 años de experiencia como lideresa social, ha trabajado incansablemente por p osicionar a las comunidades Negras, Afrocolombianas, Raizales y Palenqueras (NARP) del Atlántico. Este año fue elegida como Consejera Consultiva ante el departamento, con el aval de Los Cimarrones representando a más de 150 organizaciones NARP con una propuesta diferencial basada en género [1] . Desde allí, trabaja junto al gobierno en la ejecución de un plan de vida que contempla a las comunidades NARP como protagonistas en la preservación y promoción de la cultura y la educación con enfoque étnico. Imagen 1. Marlin Salas (segunda de derecha a izquierda) en la toma de juramento de las representantes del Consejo Consultivo de Mujeres del Atlántico 2024-2027. Fuente: Diario La Libertad (2024). Tomado de: https://diariolalibertad.com/sitio/2024/11/27/instalado-consejo-consultivo-de-mujeres-del-atlantico-2024-2027/ En el 2023, Marlin se unió a la Red de Guardianes Ambientales en favor de la recuperación del ecosistema manglar en Puerto Colombia, Atlántico. Gracias a su labor, se restauraron aproximadamente 19.000 metros cuadrados del complejo natural afectados por ocupaciones ilegales, deforestación y contaminación en la zona. Hoy el Mangle renace como un ecoparque, gracias a lideresas como Marlin que, junto con delegados del Atlántico del programa “Parques para la Gente”, se opusieron a la pérdida del Manglar y desarrollaron acciones de reforestación a través de la siembra comunitaria de cerca de 1.100 individuos de mangles rojos, la especie del ecosistema que se encuentra amenazada frente a presiones sobre la Ciénaga de Balboa en Puerto Colombia. Marlin también ha inspirado la política social de Puerto Colombia desde las mesas de construcción de la política étnica, de salud, educación, de pobreza y género. Desde su liderazgo territorial desarrolla e impulsa diagnósticos y lineamientos que orienten a los tomadores de decisiones. También informa a las secretarías sobre deficiencias en protección de los derechos educativos, laborales, de vivienda y salud y diseña estrategias y metodologías para la implementación de políticas pensadas desde la gobernanza étnica. Como lideresa afro, Marlin promueve expresiones culturales autóctonas de las comunidades negras en Puerto Colombia. Entre las que destaca el festival del dulce, el festival del bollo, de la arepa e’ huevo, entre otras manifestaciones identitarias. También es presidenta del Festival del Mar y fundadora del Festival de Cometas y el Festival Reina Palenquerito Municipal Afrodescendiente de Puerto Colombia. Asimismo, Marlin organiza eventos y actividades para que las personas mayores sean reconocidas como sabedores por las generaciones más jóvenes, a quienes se les insta a valorar el legado ancestral etnolingüístico y el patrimonio material e inmaterial afrocolombianos; tales como, las lenguas criollas y palenqueras. Los niños y niñas ocupan una parte importante de la agenda de la lideresa como gestora de paz. Desde este rol -y del de madre y abuela- Marlin se resiste a la repetición de los ciclos de violencia a través de la difusión de prácticas ancestrales de convivencia la resolución de pacífica de conflictos internos y el respeto por la familia extendida. Igualmente, dirige esfuerzos solidarios por las mujeres y víctimas del conflicto del Atlántico para que vivan con dignidad, sobre todo quienes han sido violentadas en su propia casa. Marlin se autoafirma como madre de casa y reivindica las labores de las mujeres mayores que, detrás de los calderos, no tuvieron reconocimiento. Ella misma desde hace 26 años hace ollas comunitarias porque concibe el alimento y la nutrición como portadores del buen vivir. De hecho, en su libro “cocinando en paz con Marlin Salas” argumenta que las amas de casa llevan paz a los hogares, transformando una canasta familiar pequeña en un plato preparado con amor. Además, el libro enseña la importancia de compartir y enseñar a los más pequeños de la casa las prácticas gastronómicas y, con ello, la cultura indígena y afrodescendiente. Cocoemprender es un proyecto de sostenibilidad ambiental creado por Marlin, cuyo lema es “aprendes, emprendes y te sostienes”. Este surge desde la gastronomía, específicamente con la preparación de cocadas dulces, y luego involucra el hacer artesanal, agrícola y textil, promoviendo un uso integral del coco. Marlin concibe a Cocoemprender como una propuesta que fusiona la ancestralidad con la cotidianidad, buscando no solo la producción sostenible, sino también el fortalecimiento comunitario y la inclusión social, especialmente de mujeres. El proyecto plantea un modelo integral que involucra desde la siembra de cocoteros hasta la elaboración de productos artesanales y textiles, además de la transformación gastronómica. Su visión trasciende de un emprendimiento a un proyecto social que busca visibilizar liderazgos y empoderar a las mujeres, a la vez que fomenta la responsabilidad ambiental y social. Debido a sus labores como lideresa social, Marlin enfrenta a diario graves escenarios de riesgo, en donde ha sido víctima de diferentes tipos de agresiones como amenazas y atentados. En 2017 fue víctima de un atentado tras agenda r un encuentro con una persona que aparentemente quería comparar su casa, en medio de la reunión fue ingresada de manera forzosa a un vehículo, en donde fue hostigada con un arma de fuego. Un año más tarde, recibió una corona fúnebre en su hogar, y en 2019 su hija fue intoxicada con mercurio, pese a que se desconoce si esta última agresión es una represalia relacionada con su labor de liderazgo, si es cierto que existe una trayectoria de agresiones en su contra. Este año, durante el mes de marzo, nuevamente fue víctima de amenazas, por ello teme abrir las puertas de su hogar como generalmente lo hacía para organizar ollas comunitarias, este espacio se convirtió en un comedor comunitario, en donde ofrecía platos de sopa con arroz y otras variedades gastronómicas. Como consecuencia de las mencionadas agresiones, Marlin cuenta con custodia policial proporcionada por el departamento del Atlántico, pese a ello manifiesta que se siente vulnerable frente a los riesgos que enfrenta debido a su liderazgo en el territorio, y exige garantías de seguridad para el ejercicio su labor y la de otros liderazgos. Imagen 2. Marlin Salas (segunda fila, sexta de derecha a izquierda) en la toma de juramento de las representantes del Consejo Consultivo de Mujeres del Atlántico 2024-2027. Fuente: Diario La Libertad (2024). Tomado de: https://diariolalibertad.com/sitio/2024/11/27/instalado-consejo-consultivo-de-mujeres-del-atlantico-2024-2027/ Marlin reconoce que, pese a que su labor enfrenta graves riesgos, pero también tiene grandes recompensas tanto para ella como para su comunidad, ya que a través de su trabajo como lideresa desempeñan un rol fundamental como interlocutora entre la comunidad y la institucionalidad, actuando como un puente clave para garantizar que las voces de su territorio sean escuchadas en espacios de toma de decisiones. Su labor le brinda voz a las necesidades, demandas y propuestas de grupos que, en muchos casos, carecen de acceso directo a las instituciones. A través de su lide razgo posibilita que las c omunidades se involucren activamente en procesos sociales, políticos y ambientales, contribuyendo al fortalecimiento del tejido social, impulsando el diálogo y la acción colectiva para enfrentar desafíos comunes, pues a través de la participación activa de Marlin en espacios como las mesas de políticas sociales del municipio de Puerto Colombia, y su participación en el Consejo Consultivo de Mujeres del departamento del Atlántico como representante de la mujer afrodescendiente, brinda insumos primordiales a los entes territoriales a través de la visibilización de las necesidades o demandas de la población para que posteriormente sean atendidas a través de diferentes instrumentos estatales. Marlin afirma que un buen líder “es aquel que lleva a otra persona a mostrarse”, caracterizando de esta manera su liderazgo como un liderazgo transformador, el cual pone en el centro a los demás, contribuyendo a su desarrollo integral y fomentando una cultura de colaboración y crecimiento mutuo, en donde no se busca brillar como individuo, sino que por el contrario es más valioso el éxito colectivo que el logro individual, enfocando de esta forma su energía y propósito en ayudar a los demás a descubrir y potenciar sus habilidades, talentos y capacidades, para que se brille en conjunto. Esta visión transformadora acompañada de su amplia trayectoria como lideresa social la han llevado a ser merecedora del reconocimiento Mujer lideresa afro internacional. El cual recibió con mucha alegría, entusiasmo y agradecimiento. “Este premio no es mío, es de todos y todas, todas las personas por las que he trabajado […] Es como también retribuírselo, a quienes están y quienes se han ido de los territorios, los que no tienen voces y a los que también tienen voces y que de una u otra manera todavía no han reconocido nada en de su trabajo. En definitiva, su trabajo y dedicación la han posicionado como una mujer cuya labor trasciende las fronteras de su comunidad, impactando a nivel local, nacional e incluso internacional. Marlin Salas no solo representa un ejemplo de resiliencia frente a los riesgos inherentes al liderazgo social, sino también un modelo de cómo la pasión, el compromiso y la visión transformadora pueden convertirse en agentes de cambio profundo. Su legado como lideresa afrodescendiente inspira a nuevas generaciones a soñar, trabajar y liderar con el mismo propósito de construir comunidades más fuertes, equitativas y conscientes de su riqueza cultural y ambiental. [1] La Federación de Organizaciones Sociales Del Departamento del Atlántico - Los Cimarrone representa a las comunidades Negras, Afrocolombiana, Raizales y palenquera (NARP).
- Somos la luz que acompaña y guía: Fundación Kiango
Por: Yudi Angulo Castro – Enlace Buenaventura: Línea de Jóvenes en Riesgo y Participación Juvenil. Kiango es una palabra de origen suajili que significa luz o linterna, en la cultura suajili la luz simboliza iluminación, guianza o positivismo. Según la creencia los nombres asociados a este término representan esperanza, sabiduría e iluminación. Y en honor a ese nombre esa es la labor que desempaña Kiango en el territorio, ser una luz que acompaña y guía. Kiango es una de las organizaciones que hacen parte de la Escuela de Liderazgo Juvenil de la Fundación Paz y Reconciliación - PARES en Buenaventura, bajo la financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo - AECID. Es una organización social de carácter étnico y sin ánimo de lucro que contribuye al fortalecimiento de los procesos sociales, organizativos, políticos, productivos, ambientales, artísticos y culturales de la población colombiana y de manera especial de los pueblos y comunidades Negras, Afrocolombianas, Raizales y Palenqueras – NARP, acompañando a partir de estrategias de desarrollo y bienestar con enfoque generacional, de género, étnico territorial, memoria y paz. Según el Boletín de monitoreo número 31: Niñez y conflicto armado en Colombia, de la COALICO, donde evidencian que 201 eventos afectaron directamente a más de 17.359 niñas, niños y adolescentes, estas afectaciones están relacionadas con: desplazamientos forzados, violaciones, y graves infracciones a los derechos a la vida, la libertad sexual y la integridad personal, reclutamientos forzados, entre otras. En una reciente entrevista el Personero Distrital de Buenaventura, manifestó su preocupación por el incremento de denuncias sobre reclutamiento forzado en menores en Buenaventura, una práctica ilegal que enciende las alarmas. Vea también: https://www.pares.com.co/post/aumenta-la-zozobra-en-buenaventura-por-ola-de-violencia En ese sentido, desde Kiango tienen una propuesta denominada “Afro sin límites”, que es una estrategia de acompañamiento que promueve espacios comunitarios de sensibilización para la prevención de riesgos y la protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes en contextos de conflicto armado, utilizando la participación social, la música, el baile, las narrativas, el juego y las rondas tradicionales como estrategias que potencien sus capacidades de resiliencia ante el riego en el Distrito de Buenaventura, de la que participan Laura y Luisa, dos adolescentes becarias de la Escuela de liderazgo Juvenil. El propósito central de esta estrategia es reducir el riesgo de uso, utilización y reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes en Buenaventura a través de la implementación de estrategias culturales y deportivas que promuevan su desarrollo integral y fortalezcan sus habilidades sociales y emocionales. A pesar, que en la actualidad existe una mesa de diálogo con las dos principales bandas armadas ilegales que se disputan el control por el territorio, pese a esos esfuerzos por alcanzar la tan anhelada paz en Buenaventura, se debe reconocer que el índice de homicidios ha bajado significativamente con respecto a los hechos acontecidos en años anteriores, pero persisten otros flagelos que afectan considerablemente la tranquilidad de los bonaverenses y son las acciones que involucren o afecten directamente a los niños y niñas. Vea también: https://www.pares.com.co/post/reclutamiento-forzado-de-menores-una-alarma-persistente-en-colombia La fundación Kiango adelanta su labor de acompañamiento a los pueblos y comunidades a través de tres Direcciones que engloban su quehacer social: 1. Planeación Gestión. 2. Población y Desarrollo. 3. Educación y Cultura. Movilizando permanentemente la participación de las comunidades y pueblos como agentes activos de su propio desarrollo y bienestar. Desde el trabajo organizativo se vienen adelantando acciones transformadoras que buscan contribuir al desarrollo de la Buenaventura con la que todos soñamos, seguir siendo la luz que acompaña y guía es el querer-hacer de Kiango, ser una lampara que siga iluminando el camino de cientos de niños, niñas, adolescentes y jóvenes que solo requieren de oportunidades que le alejen de situaciones que expongan su integridad física y mental.
- En Buenaventura seguimos hablando en clave de paz
Por: Yudi Angulo Castro – Enlace Buenaventura: Línea de Jóvenes en Riesgo y Participación Juvenil. El pasado 8 de noviembre la mesa sociojurídica que se estableció en Buenaventura en la que se encuentran Shotas y Espartanos, declaro que la tregua se extiende hasta el próximo 5 de febrero del año 2025, como una apuesta a la paz y a la protección de la vida. Desde ese anuncio se han venido presentando algunos hechos de orden público que lamentablemente han dejado varias víctimas en el territorio, pese a eso las voluntades de los lideres de estas facciones sigue firme por mantener la tregua hasta la fecha acordada. En el marco de un conversatorio denominado “voces del territorio, un dialogo para contribuir a la construcción de una cultura de paz sostenible en el distrito de Buenaventura” dirigido a jóvenes del curso de formulación de proyectos culturales orientado por la Escuela Taller de Buenaventura, en la que participaron 4 experiencias del territorio; Brayan Montaño coordinador de la fundación Pro&Paz, Leonard Rentería del colectivo de comunicación Eleggua y hoy líder coordinador de la emisora de paz, Karolina Guerrero asesora de la oficina de paz del distrito de Buenaventura y Yudi Angulo enlace territorial de la Escuela de Liderazgo Juvenil de la Fundación Paz y Reconciliación - PARES en Buenaventura, bajo la financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo - AECID. Vea también: https://www.pares.com.co/post/alza-la-voz-9-a%C3%B1os-haciendo-incidencia-sobre-las-violencias-basadas-en-g%C3%A9nero-en-buenaventura Este, se convirtió en un espacio de para hablar de las apuestas de las organizaciones de la sociedad civil en materia de paz, resolución de conflicto y gestión efectiva de proyectos con enfoque cultural. Pero también para hablar de las experiencias que podrían o no funcionar para quienes deseen hacer de organizaciones de base una alternativa para contribuir a la paz en Buenaventura. En ese sentido, ponemos sobre la mesa vivencias que podrían ayudar a la ciudadanía para entender cómo funciona el trabajo organizativo; un ejemplo claro de las apuestas de construcción de paz que desde esta Buenaventura marcada por el conflicto, se ha desarrollado y que ha logrado mantenerse en el tiempo, ha sido la creación del Espacio Humanitario en el sector de la Playita en el año 2014, conocemos de primera la historia que rodea todo este proceso, pero también estamos conscientes que en Buenaventura el conflicto no ha cesado, solo se ha transformado; en resumen, esto se convirtió en la excusa para promover un lugar seguro y libre de violencias para la comunidad residente del sector, este espacio permitió visibilizar las violaciones a los derechos humanos y posicionó a las comunidades como protagonistas en la defensa de sus derechos. Otra apuesta para pensarse en son de la paz que necesita Buenaventura fue la apuesta en sus inicios del Movimiento del Paro Cívico para vivir con dignidad y en paz en el territorio. La movilización social es una herramienta poderosa cuando se articula con demandas claras y legítimas y el pueblo bonaverense fue ejemplo de eso, esta manifestación impulsó acuerdos con el Gobierno Nacional, incluyendo inversiones sociales en infraestructura, salud y educación, entre otros, buscando cerrar brechas históricas en el territorio. En este punto, podemos preguntarnos, ¿Qué alimenta la violencia en este territorio?, la repuesta coloquial podría ser muchas cosas, pero sin duda, la falta de acceso a servicios básicos ha perpetuado ciclos de exclusión que alimentan la violencia y el conflicto social. Además, a pesar de la firma del acuerdo de paz en 2016 y todo el proceso de desmovilización, persisten en el territorio nuevos grupos u otros que surgieron de los antiguos, sumado a las acciones de narcotráfico, que, por la posición geoestratégica con la cuenta esta región se convierte en un atractivo para este tipo de actividades ilícitas. La débil implementación de dicho acuerdo se convierte en otro factor que agudiza el problema. Y, por último, pero no menos importante, las distintas narrativas que se tejen alrededor de lo que es en realidad Buenaventura, la visión que desde el exterior se tiene de la ciudad y de quienes la habitan. Buenaventura aún enfrenta una narrativa externa que prioriza sus problemas sobre sus oportunidades y potencialidades. Buenaventura es un territorio lleno de voces que claman justicia, dignidad y paz. Estas voces, cuando se articulan desde el diálogo y la acción colectiva, pueden transformar no solo a la región, sino al país entero. Karolina Guerrero de la oficina de paz, expresa que se encuentran en un momento importante y es la elaboración de una política pública de paz y no violencia en el distrito, además, del mapeo de organizaciones que trabajan en temas de paz, para generar a partir de ahí acciones de articulación que permitan fortalecer el trabajo en materia de paz en Buenaventura. Siguiendo el hilo, desde la oficina pacifico se presenta en decálogo de recomendaciones que podrían ayudar a las organizaciones de base del territorio en su apuesta por una paz sostenible y duradera, en la que todos y todas tengamos un papel trascendental. Vea también: https://www.pares.com.co/post/dec%C3%A1logo-de-paz-una-apuesta-de-las-osc-en-buenaventura-para-la-construcci%C3%B3n-de-la-paz-urbana
- La absurda muerte de Stalin
Por: Iván Gallo - Editor de Contenido Andaba contento, era su cumpleaños y como mandaba la tradición que él mismo había impuesto había que hacer una fiesta. Invitó a sus ministros, a todos esos títeres que humillaba en sus cenas, a las mujeres con las que pasaba sus noches en vela, a su hija Svetlana que a los 28 años ya llevaba encima tres matrimonios y se sentía irremediablemente una solterona. El anciano estaba animado, quería bailar. Ya había obligado a sus hombres de confianza a que danzaran. A Jrushchov esto le molestaba profundamente. Era demasiado grueso y su aspecto bailando eran tan ridículo como el de una vaca patinando en hielo. Sin embargo ahí estaba con Beria y otros hombres del politburó. Todos con miedo de que los rumores que circulaban por el Kremlin fueran verdad. Siempre había rumores de purgas pero Pravda últimamente había estado insistente; dentro de poco se destaparía una olla podrida donde caería más de una cabeza que hasta el momento se suponía intocable. Entonces lo mejor era bailar hasta que se te rompieran los zapatos. No era un buen momento para contradecir al supremo. El dictador a pesar de sus dolencias le pidió a Svetlana una pieza, ella se negó, el jefe no soportaba el rechazo, sobre todo delante de sus subalternos y perpetrado por su propia hija, así que en tono de chanza la agarró del pelo y la arrastró hasta el centro del salón, allí con suavidad le tomó las manos como si ya fuera a empezar la danza pero Svetlana con los ojos arrasados en lágrimas se fue corriendo a encerrarse en su cuarto como lo había hecho su madre veinte años antes, solo que ella no tomaría la decisión extrema de dispararse una bala en el corazón. Los subalternos apenados por la escena que presenciaron se hicieron los de la vista gorda y continuaron con la farsa. Si el jefe estaba feliz pues lo ideal era no amargarle el rato. Estar ya en su dacha era todo un logro. Una vez al mes Stalin acostumbraba a celebrar una comida. Invitaba a la gente que consideraba más cercana. No ser invitado constituía tener la certeza de que se había caído en desgracia con el dictador, pero recibir la invitación equivalía a noches de preparación sicológica para lo que iba a sobrevenir en esa cena. Por lo general Iosef no servía vino sino vodka ya que es más efectivo a la hora de soltar la lengua. Le ordenaba a sus cocineros que fueran generosos con la cantidad de pimienta repartida en cada plato, esto pondría a sus ministros de un ánimo todavía mas crispado. Sin duda disfrutaba ver a todos esos pobres diablos asustados en sus mesas, pensando cada palabra que tenían que decir. Al cabo de dos copas los unos culpaban a los otros. Stalin estaba ahí, más que divertido y cuando empezaba a aburrirse su mirada se centraba en el escote de la esposa de alguno de los ministros. Muchas veces se retiraba sin avisar a su cuarto llevando de la mano a cualquiera de ellas. Los ministros tenían que ahogar sus penas con vodka. Pero en esa noche de invierno de 1953 Stalin ya no tenía el vigor de antaño. Ordenó poco antes del amanecer que dieran por concluido el baile. Cuando se retiró el último de los invitados dio indicaciones expresas de que no quería ser molestado por nadie hasta que él lo indicara. El día que se avecinaba iba a ser usado solamente para descansar. Ser el rector absoluto de los destinos de una potencia como la Unión Soviética tenía un desgaste que evidentemente estaba empezando a sentir. Antes del mediodía tenía la costumbre de tomarse una taza de té con una rodaja de Limón. Los soldados que custodiaban la dasha comenzaron a inquietarse cuando vieron que pasaban las horas y el supremo no cumplía con su rutina. A las seis de la tarde la casa respiró aliviada cuando vieron que desde su cuarto se encendía una luz. Esperaron varios minutos a que se escucharan los pasos del líder bajar por las escaleras. Pero nada de eso ocurrió. Poco antes de las once de la noche se tomó una determinación; había que llamar a sus colaboradores más cercanos. Stalin era presa de su propio invento; la concentración absoluta del poder. Nadie podía tomar una decisión ya que sus órdenes eran de hierro, si había dicho que nadie podía molestarlo al otro día esto se tenía que seguir a rajatabla. Beria fue el primero en llegar, lo siguió Malenkov y poco después Nikita Jrushchov. Cuando se reunieron los tres tomaron la decisión de entrar en la habitación. Lo que vieron fue una imagen que los horrorizó. En el piso estaba el dictador entre un charco de orines y mierda. El ataque había ocurrido a las seis de la tarde justo en el momento en que los soldados vieron cómo se encendía la lámpara. A pesar de que estaba inconsciente y que su vómito incesante de sangre revelaban la gravedad de su estado nadie tomó la decisión de llamar un médico. Se encerraron en el cuarto deliberando que hacer. El que tomara el teléfono para pedir un médico podía correr el riesgo de que cuando se despertara el dictador fuera condenado a muerte por tomar decisiones en ausencia del líder. Además los cuatro que estuvieron en ese cuarto tenían la presión de una purga inminente. Lo dejaron agonizar y solo hasta las seis de la mañana llamaron a un médico. El problema es que los mejores especialistas del país estaban encerrados en cárceles acusados recientemente de una conspiración para acabar con la vida del líder. Mandaron emisarios hasta las prisiones para preguntarle qué extraña enfermedad había azotado al supremo. Hablaron de un extraño síndrome el Cheynes- Stokes que atacaba directamente el sistema respiratorio. Iosef Stalin moriría 24 horas después de tener el ataque. Empezaría la disputa por el poder que coronaría a Nikita y condenaría a Bería. Se ordenó embalsamar el cuerpo y ponerlo al lado del otro padre de la revolución, Vladimir Lenin. Pocos años después Jrushchov encontraría la venganza a ser obligado a bailar como una osa embarazada patinando en el hielo, a ser tratado como lo que era, un campesino inculto y ebrio. En medio de una reunión del partido denunció al mundo los crímenes del stalinismo. Ordenó, como máximo dirigente de la Unión Soviética, desmontar el culto a Stalin. Su cadáver fue sacado del panteón de Lenin y fue enterrado afuera del Kremlin. Sin saberlo Nikita Jrushchov le ponía los clavos al ataúd del sueño soviético. No se puede sostener un imperio sin el culto al héroe. A falta de Dios el pueblo tenía a Stalin pero ahora no tenía más que un libro gigante, espeso, infumable escrito por un alemán. Después de Stalin ya no había nada en que creer dentro del inabarcable territorio de la Unión Soviética.
- Cuando Donald Trump pidió pena de muerte para cinco niños negros en Nueva York
Por: Redacción Pares Foto tomada de: El Español Fue el 19 de abril de 1989 cuando la vida se les acabó a cinco menores de edad en Nueva York. El único crímen que habían cometido era ser afroamericanos. Se llaman Antron McCray, Yusef Salaam, Korey Wise Raymond Santana y Kevin Richardson. Ese día habían entrado al Central Park. Tenían en la sangre la fiebre del beisbol, de estar otro fin de semana en primavera en Nueva York. Se reunieron con otros treinta muchachos más de Harlem. Iban haciendo bulla, molestando a los transeuntes. Mientras tanto, al otro lado del parque, una corredora llamada Trisha Meilli, era asaltada, golpeada y violada por un hombre que, en menos de un año, había violado y descuartizado a cuatro mujeres en Nueva York. La policía llegó, investigó y vio muchachos negros. Sería un caso fácil de resolver. Sólo sería quitarle todos sus derechos, llevarlos a una comisaría, mantenerlos 42 horas despierto, insultarlos, golpearlos, chantajearlos, sacarles en cara que son negros, que no son norteamericanos, que son animales. Animales es la palabra que más repiten los investigadores de la fiscalía. La palabra queda impregnada en la narrativa de medios. Cinco animales “salvajearon” -verbo que se inventó para describir lo que sucedió- a Trisha Meilli, mujer blanca, rubia, emprendedora de éxito. Una verdadera norteamericana. Los niños, asustados, dijeron que lo habían hecho todo. Se echaban la culpa unos a otros. Los niños ni siquiera se conocían. Para los blancos todos eran iguales. Así que los metieron en una bolsa y se lo dieron a los leones. Fue una verguenza el juicio. La defensa intentó convencer al jurado y al juez -quien era un reconocido verdugo- que los niños habían sido torturados para confesar, que no había una sola prueba que los condenara, ni ADN, ni nada. Que los testimonios de los policías se contradecían. Que estaban lejos del lugar de la violación cuando sucedió. Trisha milagrosamente sobrevivió y los chicos creían que eso los salvaría pero no, Trisha no recordaba nada. Así de brutal fue el ataque. Sin embargo nada de eso importó. Eran negros y tenían que pagar. Fueron encontrados culpables en un juicio exprés. Los condenaron a 10 años de cárcel. En el fragor mediático Donald Trump apareció. En ese entonces Trump, un aventajado alumno del abogado Roy Cohn, especialista en defender demonios, quien le enseñó su mantra “atacar, contraatacar, nunca disculparse”, era el celebrity más reconocido en Estados Unidos. Un fiel exponiente de la década de los ochenta, frívola, ordinaria, descaranada, la década en donde dejó de dar verguenza ser rico. Y Trump salía todo el tiempo a dar entrevistas, restregando sus millones al que no lo tenía, haciendo sus proyectos desangrando a Nueva York ya que ni siquiera pagaba impuestos. Trump tenía que meter sus narices en todos los temas polémicos. Sobre todo en un tema donde una rubia había sido atacada por cinco “animales”. Así que el hoy presidente de los Estados Unidos pagó un anuncio de 85 mil dólares en el New York Times pidiendo “pena de muerte” para los cinco niños del Central Park, los trató públicamente de “animales” mientras botaba babaza de la rabia. En el año 2002 el verdadero agresor de Trisha Meilli confesó todo. Los niños, que ya eran muchachos con vidas absolutamente destruidas, sometidos a cualquier tipo de abusos mientras estuvieron presos, fueron resarcidos públicamente. El gobierno de los Estados Unidos pagó una indemnización de 41 millones de dólares por las vidas que arruinaron. Trump jamás se disculpó. Sin embargo en noviembre del 2024 los “cinco del Central Park” demandaron al recién elegido presidente por “declaraciones falsas y difamantes” Los asesores de Trump tan sólo respondieron esto: “ es otra frívola demanda de interferencia electoral” que se hace para distraer al pueblo estadounidense de la peligrosa agenda liberal de Kamala Harris y de su fallida campaña”. Trump jamás se disculpará. Lo preocupante que este hombre, abiertamente racista y misógino, que tiene 34 condenas, será, una vez más, presidente de los Estados Unidos.
- Tibú joven y resiliente: Construyendo un nuevo capítulo
Por: Sebastian Solano - Coordinador de la línea Jóvenes en Riesgo y Participación Juvenil En las montañas y llanuras del Catatumbo, donde el conflicto ha dejado cicatrices profundas y el olvido parece ser una constante, una generación de jóvenes está trazando un camino distinto. En Tibú, una de las zonas más afectadas por la violencia en Colombia, la Escuela de Liderazgo Juvenil (ELJ) ha encendido una chispa de transformación. Este programa, liderado por la Fundación Paz y Reconciliación (PARES) con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), no solo ha capacitado a jóvenes en liderazgo, sino que les ha dado las herramientas y la confianza para convertirse en agentes de cambio en sus comunidades. En el Catatumbo, un territorio donde los problemas ambientales, la exclusión social y la falta de oportunidades son cotidianos, los jóvenes de la ELJ están demostrando que el cambio es posible. Sus ideas se están materializando en proyectos innovadores que prometen impactar a cientos de personas en 2025. Desde su inicio en abril del 2024, la ELJ ha sido un espacio de encuentro, aprendizaje y construcción colectiva. Los jóvenes de Tibú, provenientes de barrios y veredas marcados por la desigualdad y el conflicto, han encontrado en este programa no solo una oportunidad de aprendizaje, sino una comunidad que comparte su visión de un futuro mejor. Vea también: Escuelas de Liderazgo Juvenil: Cómo le fue a Norte de Santander en el primer semestre del año. La formación en la ELJ no ha sido convencional. Lejos de limitarse a la teoría, el programa ha utilizado metodologías participativas que han permitido a los jóvenes identificar las necesidades de su territorio y transformar esas problemáticas en proyectos concretos. Desde ejercicios de cartografía social hasta el uso de herramientas como el diagrama de Ishikawa y el Canva Social, los participantes han aprendido a estructurar iniciativas con impacto tangible. 1. Muévete por el Ambiente: Una revolución verde En Tibú, donde los problemas ambientales han sido agravados por la deforestación, la contaminación y la falta de educación ambiental, Muévete por el Ambiente surge como una iniciativa integral liderada por jóvenes de la Escuela de Liderazgo Juvenil (ELJ). Este proyecto creado por los jóvenes becarios de la Red Nacional de Jóvenes de Ambiente, Catatumbo Vivo y la Corporación de Defensa Ambiental del Norte de Santander (Corponor). Estas organizaciones unen esfuerzos para promover una cultura de sostenibilidad que impacte a toda la comunidad. Iniciativas clave: · Sembratones comunitarias: Con el apoyo técnico de Corponor, se realizarán jornadas de reforestación en zonas degradadas, plantando especies nativas para restaurar los ecosistemas locales. Estas actividades incluirán la participación de más de 300 personas, entre niños, jóvenes y adultos de las comunidades afectadas. · Guardianes de las Abejas: En alianza con la Asociación Apícola del Catatumbo, se creará un semillero apícola que educará a 30 familias rurales sobre la importancia de las abejas en la biodiversidad, fomentando además la producción sostenible de miel como fuente de ingresos adicionales. Vea también: Las abejas y la paz con la naturaleza en el Catatumbo. · Reciclarte: En colaboración con Catatumbo Vivo, se desarrollarán talleres creativos donde los residuos sólidos recolectados en campañas comunitarias serán transformados en arte y moda. Esto busca sensibilizar a las comunidades sobre el manejo de residuos y la importancia del reciclaje. Este proyecto aspira a movilizar a más de 500 personas en actividades de sensibilización, reducir los residuos en las comunidades involucradas y fortalecer la conexión entre sostenibilidad ambiental y participación comunitaria. Vea también: El Catatumbo dice presente en la COP16 2. Vincúlate al Parche: El poder de la juventud unida En un municipio donde las oportunidades de participación juvenil han sido históricamente limitadas, Vincúlate al Parche busca empoderar a los jóvenes como protagonistas del cambio social y político. Este proyecto es liderado por los jóvenes becarios de la Plataforma Municipal de Juventudes de Tibú, la Fundación Moiras, y el respaldo institucional de la Defensoría del Pueblo. Componentes principales: · Formación en ciudadanía activa: En talleres liderados por la Fundación Moiras, los jóvenes recibirán capacitación sobre el Estatuto de Ciudadanía Juvenil y herramientas de incidencia política, preparándolos para participar en espacios como el Consejo Municipal de Juventudes. · Campañas de sensibilización: Con el apoyo de la Plataforma Municipal de Juventudes, se lanzarán campañas en redes sociales y medios locales para visibilizar los derechos y roles de la juventud en la toma de decisiones. · Festival de la Juventud: Este evento será el punto culminante del proyecto, combinando ferias de emprendimientos juveniles, actividades deportivas y un recorrido en bicicleta que resaltará espacios emblemáticos del municipio. Este proyecto no solo aumentará la participación de los jóvenes en espacios políticos y sociales, sino que fortalecerá su conexión con las comunidades y sus instituciones. Somos Tibuyanos: Reconectar con las raíces En un territorio donde el conflicto ha erosionado las tradiciones locales, Somos Tibuyanos busca rescatar la identidad cultural de Tibú a través del arte, la memoria y el diálogo intergeneracional. Este proyecto es liderado por los jóvenes becarios de la Corporación Cultural del Catatumbo, la Fundación Visibles, y organizaciones artísticas locales. Actividades destacadas: · Encuentros intergeneracionales: Con el respaldo de la Corporación Cultural del Catatumbo, se organizarán espacios donde adultos mayores compartirán historias, mitos y leyendas con los jóvenes, preservando la tradición oral de la región. · Semilleros culturales: En colaboración con la Fundación Visibles, se ofrecerán talleres de danza folklórica, muralismo y narración oral. Estas actividades no solo fomentarán el aprendizaje artístico, sino también el orgullo por las raíces culturales. · Producción audiovisual: Con la participación de artistas y videógrafos locales, se crearán videoclips que capturen y difundan estas tradiciones a través de plataformas digitales, conectando a las nuevas generaciones con su patrimonio. Este proyecto busca fortalecer el sentido de pertenencia en Tibú, involucrar a más de 200 jóvenes y adultos en actividades culturales, y crear un archivo audiovisual que celebre la riqueza cultural del Catatumbo. Vea también: Corporación Pride: La lucha diversa del Catatumbo El futuro que la juventud de Tibú está construyendo El camino recorrido por la Escuela de Liderazgo Juvenil (ELJ) en Tibú no ha sido fácil, pero cada desafío ha dejado una lección que fortalece la visión de cambio que estos jóvenes tienen para su municipio. Desde la falta de recursos hasta la resistencia inicial de comunidades golpeadas por el conflicto, cada obstáculo se ha convertido en una oportunidad para aprender, adaptarse y avanzar. Uno de los aprendizajes más significativos ha sido el valor del trabajo colectivo. Para los jóvenes, entender que sus esfuerzos se multiplican cuando trabajan en equipo ha sido un cambio de paradigma. Además, la importancia de las alianzas con actores locales, como instituciones educativas, líderes comunitarios y organizaciones que integran la escuela, ha sido clave para que los proyectos avancen con una visión integral. Estas conexiones no solo han abierto puertas, sino que han reforzado la confianza en que el cambio es posible cuando todos reman en la misma dirección. Vea también: En el Catatumbo: El desarrollo social lo lideran los y las jóvenes Por último, la resiliencia ha sido un motor indispensable. En un contexto donde la adversidad es una constante, los jóvenes han demostrado que la voluntad de transformar su territorio puede superar incluso las barreras más difíciles. Con las in incitativas de los jóvenes, Tibú no solo están transformando su territorio; está escribiendo una nueva narrativa para el Catatumbo. Una que deja atrás los estigmas de conflicto y violencia para dar paso a historias de paz, reconciliación y resiliencia.
- Luces, cámara y acción por la participación juvenil de Cúcuta
Por: Anderson Salinas Enlace Norte de Santander de la Línea de Jóvenes en Riesgo y Participación Juvenil "Sueños de Película" nace en el año 2019 con la idea colectiva de 3 jóvenes apasionados por el cine; con la propuesta inicial de crear nuevas historias y proyectos artísticos que aportarán significativamente en el desarrollo cultural del municipio de Cúcuta. Actualmente el colectivo está conformado por 25 jóvenes cucuteños involucrados en procesos creativos con la finalidad de construir nuevas oportunidades, entornos seguros y de sana convivencia. Uno de estos jóvenes, apasionados por el cine, es David Ramírez, quien también es becario de la Escuela de Liderazgo Juvenil que adelanta la Fundación Paz y Reconciliación con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). David cuenta a Pares que: “La principal razón por la que decidimos organizar nuestro colectivo se basó en el poder que tienen las historias de empoderar nuestra comunidad y de mostrar los escenarios increíbles que tiene nuestro municipio a través de la creación audiovisual, la fotografía, la narrativa y el talento que lo conforma”. Uno de los logros más significativos y valiosos que consiguieron como colectivo fue llegar a varios municipios del departamento, donde a través del arte hemos impartido nuevos conocimientos y que los beneficiarios se apropien de los territorios, puedan alzar su voz a través de una pieza audiovisual y contar su historia Como uno de los fundadores del colectivo "Sueños de Película", David comenta que la principal razón fue crear un espacio ideal para el fortalecimiento de las relaciones interpersonales entre nuestros jóvenes y demostrar el universo creativo que existe cuando se crean estos espacios David, tiene 25 años, es estudiante de último semestre de ingeniería agroindustrial y es egresado del SENA en la tecnología de producción de multimedia y para ellos, el cine se convirtió en una herramienta fundamental para todo el equipo del colectivo "Sueños de Película"; ya que a través del arte pueden contar grandes historias que merecen ser contadas, historias que inspiran, invitan a la reflexión y sobre todo enaltece la creatividad y liderazgo de los jóvenes partícipes en la creación de espacios seguros y trabajo en equipo. De igual forma, la Escuela de Liderazgo Juvenil se presentó como una de las razones positivas para continuar adelante con el liderazgo colectivo, “con el conocimiento y herramientas adquiridas hemos podido implementar y puesto en práctica lo aprendido y avanzar con nuevas estrategias para seguir creciendo y adelante en nuestra labor, como el proyecto que presentamos y el cual desarrollaremos en 2025, donde pretendemos crear conciencia desde el cine, para la protección del medio ambiente”, agrega Angelica Durán, también becaria de la Escuela de Liderazgo Juvenil de Cúcuta. Es así, como la Escuela de Liderazgo Juvenil, fue el primer escenario que les abrió las puertas para seguir creciendo como colectivo. Un camino que labran desde la producción audiovisual como herramienta de participación juvenil. Fue allí, en “Sueños de película” que David Ramírez y Angelica Durán encontraron un lugar en el mundo para crecer como personas y seguir aportando a la construcción de la identidad cultural de Cúcuta y Norte de Santander.
- “Sé que una acción sencilla realizada con amor puede generar grandes transformaciones” - Ruby Fabiana Angulo
Por: Rafael Acosta Enlace Tumaco de la Línea de Jóvenes en Riesgo y Participación Juvenil Ruby Fabiana Angulo, joven tumaqueña de 18 años, es becaria de la Escuela de Liderazgo Juvenil de la Fundación Paz y Reconciliación (PARES) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Actualmente cursa el grado once con énfasis en asistencia administrativa y sistemas. Desde los 15 años, Ruby ha desarrollado su liderazgo a través del colectivo Benkos, que le ha servido como plataforma para descubrir su pasión por el servicio social y decidir que dedicaría su vida al bienestar de los demás. Ruby es conocida por ser una joven inquieta que encuentra en las dificultades oportunidades para aprender y crecer. A lo largo de su trayectoria, ha desarrollado habilidades de liderazgo y considera que una de las más valiosas es compartir sus conocimientos, fortalecer a los equipos mediante la capacitación continua y crear una agenda formativa que facilite alianzas significativas. Su objetivo es formar jóvenes líderes capaces de generar un impacto positivo en el territorio. Para Ruby, las iniciativas comunitarias son la clave para construir fortalezas extraordinarias. Su experiencia en el liderazgo le ha permitido participar en proyectos significativos, muchos de ellos liderados por mujeres empoderadas. Una de las iniciativas más destacadas en las que ha colaborado es el fortalecimiento de las mujeres tumaqueñas dedicadas a la comercialización del cacao. Este proceso, que incluye la compra del cacao, su secado, la aplicación de aromas y su comercialización con valor agregado, no solo impulsa el fortalecimiento económico de las mujeres, sino que también genera una ruta de acción para potenciar sus capacidades, desde la niñez hasta la adultez. Dentro de la Escuela de Liderazgo Juvenil, Ruby forma parte del equipo ambiental, compuesto por jóvenes mujeres comprometidas con el fortalecimiento del gremio reciclador. A través de esta iniciativa, buscan generar conciencia social y ambiental, promover el cuidado del entorno y fomentar un sentido de pertenencia en la comunidad. Su meta es contribuir al mejoramiento de los espacios en Tumaco y valorar verdaderamente el medio ambiente del territorio. “He visto cómo, a lo largo de los años, nuestro territorio se deteriora debido al mal manejo de los desechos y a la falta de amor hacia nuestra tierra. Si nosotros no tomamos acción, nadie de afuera vendrá a hacer lo que nos corresponde. Creo firmemente que las mujeres tenemos la capacidad de transformar el mundo y ser las agentes ambientales que tanto necesitamos en Tumaco. En medio de tanta violencia, una acción sencilla realizada con amor puede generar grandes transformaciones”, expresó Ruby Fabiana Angulo.
- “Sueño con ser un gran líder para Tumaco” - Jhon Edward Cortés
Por: Rafael Acosta Enlace Tumaco de la Línea de Jóvenes en Riesgo y Participación Juvenil Jhon Edward Cortés, becario de la Escuela de Liderazgo Juvenil de la Fundación Paz y Reconciliación (PARES) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), es un joven tumaqueño de 16 años que cursa el octavo grado en la Institución ITIN del municipio de Tumaco. Desde pequeño, Jhon ha mostrado gran interés en los temas sociales y una disposición constante para aprender. Es miembro activo de la organización Construyendo Generación, a través de la cual utiliza el deporte como una herramienta para transmitir mensajes de paz y reconciliación en diferentes sectores del municipio. En este contexto, ha contribuido al desarrollo territorial con una actitud positiva, incluso frente a las adversidades. Vive con sus abuelos, quienes le han inculcado valores esenciales para la vida, destacándose entre ellos el servicio a los demás. Inspirado por esta enseñanza, busca ser un ejemplo para sus compañeros y su comunidad. Apasionado por el deporte, Jhon constantemente diseña estrategias deportivas que promuevan la unión en el territorio tumaqueño y ofrezcan alternativas frente a la violencia que afecta a la región. Tumaco enfrenta índices alarmantes de violencia. Según el Observatorio de Género de Nariño, en 2023 se registraron 302 mujeres asesinadas en el municipio, víctimas de violencia de pareja o del conflicto armado, lo que ha llevado a declarar alerta roja. “Es triste ver a tantas personas muriendo por la violencia en nuestros territorios. Por eso quiero ser un agente de transformación. Quiero ser un gran líder para Tumaco y encontrar herramientas que nos ayuden a mejorar como sociedad. Creo que el deporte une, recrea, crea lazos fuertes y, sobre todo, nos hace compartir momentos alrededor de la sonrisa. Eso es lo que necesita el país: abrazarse y sonreír”, manifestó Jhon. En la Escuela de Liderazgo Juvenil, Jhon ha adquirido valiosas herramientas para convertirse en un gestor social. Una de las habilidades que ha desarrollado es la formulación de proyectos, lo que le permite identificar áreas que necesitan fortalecerse y gestionar recursos a nivel institucional o mediante cooperaciones nacionales e internacionales. Además, forma parte del equipo de comunicaciones de la Escuela de Liderazgo Juvenil de PARES en Tumaco. Desde este equipo, trabajan en la creación de estrategias de comunicación asertiva, transparente y accesible para toda la población del municipio. Esta iniciativa surge como respuesta a la desinformación que históricamente ha puesto en peligro a los líderes locales y ha obstaculizado procesos importantes debido a su manipulación en favor de intereses particulares. “Creo que las comunicaciones son fundamentales para crecer como municipio. Nos abrirán el camino a los nuevos liderazgos que estamos desarrollando en el país, y debemos garantizar que sean efectivas, transparentes e imparciales”, afirmó Jhon Cortés.