El excomandante de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), Salvatore Mancuso, compareció ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) en la segunda jornada de audiencias de aporte a la verdad. A través de una conexión virtual, Mancuso entregó detalles sobre la conivencia entre las estructuras paramilitares, miembros de la Fuerza Pública y las élites políticas en Colombia. Además, reveló información sobre la complicidad del Gobierno de Ernesto Samper en las irregularidades en la desmovilización del Ejército Popular de Liberación (EPL).

El exjefe paramilitar también habló sobre los "hornos" utilizados por los paramilitares para incinerar cadáveres en la subregión del Catatumbo, en la frontera con Venezuela. Según Mancuso, los paramilitares enterraron a cerca de 200 víctimas en el lado venezolano debido a la gran cantidad de cuerpos que estaban siendo encontrados en la región. Además, aseguró que hubo coordinación con militares y fuerza pública del lado de Venezuela para estas operaciones.

Por último, Mancuso se refirió a la alianza con las élites políticas y económicas de algunas regiones del país, como en la costa Caribe, especialmente en el departamento de Cesar. Según el excomandante, los paramilitares se reunieron con "todas las personas ricas" de esa región y contaron con la colaboración de Jorge Gnecco, quien facilitó las casas donde tenían el centro de operaciones. Estas revelaciones son parte de un proceso de verdad y justicia que busca esclarecer los crímenes cometidos durante el conflicto armado en Colombia.