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Las derechas de Colombia en aprietos

Por: León Valencia


Si la segunda vuelta presidencial fuera hoy, Gustavo Petro y la Coalición del Pacto histórico ganarían las elecciones. Faltan cinco meses para ese momento, faltan las parlamentarias, las consultas entre las coaliciones y la primera vuelta presidencial. Son muchos eventos encadenados con grandes incertidumbres, pero podemos estar seguros de que la segunda vuelta no será similar a la de 2018, donde las derechas ganaron cómodamente la presidencia en cabeza de Iván Duque.

A la segunda vuelta de 2018 llegó el uribismo empoderado, después de haber impuesto el No al acuerdo de paz en el plebiscito. Tenía éxito, igualmente, con la propaganda de que Petro y las izquierdas eran la encarnación de Nicolás Maduro, y el futuro de Colombia sería similar al de Venezuela si ganaba esta corriente política, desatando el miedo entre los votantes y entre buena parte de las élites tradicionales del país.

Con estas enseñas, Iván Duque logró que, después de pasar a segunda vuelta en compañía del Partido Conservador y las iglesias evangélicas, obtuviera el respaldo del Partido Liberal, Cambio Radical y el Partido de la U, que le agregaron 350 municipios y cerca de cuatro millones de votos. Petro se quedó con el apoyo de las izquierdas y con una parte del voto de opinión.

Ha pasado mucha agua bajo los puentes. El gobierno de Duque ha resultado un desastre y termina con una favorabilidad inferior al 30%, lo mismo le ocurre a su mentor y jefe, Álvaro Uribe Vélez, ahora con una baja popularidad y envuelto en graves escándalos judiciales. La pandemia ha profundizado la crisis social y las desigualdades. El estallido social de 2021 dejó ver la desesperación y la inconformidad ciudadana, en especial la desesperanza de los jóvenes. El acuerdo de paz se ha legitimado y ha ganado un mayor respaldo, a pesar de las interferencias del gobierno. Todos los partidos que apoyaron a Duque en 2018 están divididos y una parte de sus lideres migraron hacia las izquierdas. El país pide cambios, pide transformaciones. Estos acontecimientos se reflejan, claramente, en las encuestas del momento y en la disposición de las consultas y las candidaturas.

A Oscar Iván Zuluaga, candidato del uribismo, no lo admitieron en la consulta de la Coalición Equipo por Colombia porque, algunos de sus integrantes, piensan que resta más de lo que suma; le tocará, entonces, ir sólo a primera vuelta sino declina en favor de otro en los próximos meses. La Coalición Equipo Colombia tiene encima el sambenito del continuismo, dado que sus lideres y partidos han acompañado a Duque y marca, la mayoría de las veces, de tercera en las encuestas. Las iglesias evangélicas están buscando un candidato propio. Además, ha saltado a la arena política Rodolfo Hernández, un candidato que les araña votos a las derechas tradicionales. Mientras tanto, lo que queda del Partido Liberal y el ala de Cambio Radical, que respalda a Germán Vargas Lleras, no han definido su postura presidencial. Las derechas tendrán, entonces, tres o cuatro candidaturas en primera vuelta y corren el peligro de que pasen a segunda vuelta Petro y el candidato que salga de la consulta de la Coalición Centro Esperanza, en la que puntea Sergio Fajardo. Lo cual sería un giro de 180 grados en el arco político colombiano.

De acuerdo con esta fotografía del momento, los escenarios de segunda vuelta serían: Petro y Fico Gutiérrez; Petro y Fajardo; Fajardo y Fico Gutiérrez. Obviamente hay otras variaciones, porque en la coalición Equipo Colombia también puede ganar Alex Char y en la coalición Centro Esperanza tienen opción Galán y Gaviria. Incluso algunos analistas le dan opción de colarse a segunda vuelta a Rodolfo Hernández.

Pero la realidad es que las derechas se presentan con mayores divisiones y fisuras que las izquierdas, con candidatos menos reconocidos por la opinión y con un ambiente electoral de cambio, donde el discurso del miedo a la izquierda ha perdido potencia.

Preocupa, eso sí, el fantasma del fraude electoral que ha venido rondando en las últimas semanas por los desafueros del registrador nacional, Alexander Vega.

Nota: A mis antiguos lectores de El Colombiano, El Tiempo y Semana, les cuento que esta columna saldrá todos los domingos en Pares.com.co, con el filo independiente y critico que me ha caracterizado desde hace 27 años, cuando inicié mi labor de opinión en los diarios nacionales.

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