La eterna soberbia de Álvaro Leyva le trae problema gordo
- Redacción Pares
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Por: Redacción Pares

El excanciller Álvaro Leyva ha sido el protagonista de uno de los escándalos políticos del año. Tal y como reveló en su momento el diario El País a punta de audios, el excanciller estaba tramando nada más y nada menos que un golpe de Estado. Esto es un delito gravísimo que configura el de traición a la patria. Como parte de ese plan desestabilizador, Leyva sacó una serie de cartas que hizo públicas señalando la vida personal del presidente de la república. Estas conversaciones, las sostuvo con el congresista republicano Mario Diaz- Balart y en ellas salen nombradas varias figuras de la política nacional, como Francia Márquez, actual vicepresidenta. Inmediatamente se dio a conocer este escándalo, Leyva puso pies en polvorosa y viajó hacia España en donde está prácticamente refugiado.
Pero allí no paran sus líos jurídicos en Colombia. La Procuraduría acaba de llamarlo a juicio disciplinario por no acatar la orden que le impedía seguir siendo canciller a principios de 2024, después de que le estallara otro escándalo, el de los pasaportes, cuando entró en una confrontación con la firma Thomas Greg and Son. El ente de control determinó que, a pesar de la suspensión que cayó sobre él, Leyva siguió con sus oídos sordos, campante y no se movió de su cargo. La Procuraduría tiene 19 notas diplomáticas y 76 resoluciones como prueba de que Leyva siguió en el cargo, a pesar de la suspensión de dos meses.
Incluso hay una reconvención escrita por parte de la Procuraduría, recordándole a Leyva que estaba suspendido y que no podía ejercer sus funciones, algo en lo que Leyva simplemente encogió los hombros y siguió su camino como si no pasara nada. “Así las cosas, cuando se repara en el comportamiento realizado por Álvaro Leyva Durán, se establece que entre el 24 de enero de 2024 y el 6 de febrero de 2024, continuó ejerciendo las funciones del cargo de ministro de relaciones exteriores, a sabiendas que existía una decisión administrativa que ordenó la suspensión provisional en el ejercicio de las mismas".
Todo apunta a que Leyva, quien además podría recibir algún tipo de castigo por su presunta participación en un probable complot que buscaba derrocar a Gustavo Petro, podría enfrentarse a un juicio disciplinario con la Procuraduría simplemente por su soberbia. Desde siempre ha sido consecuente con su sangre y ha hecho lo que ha querido.