Por: Laura Cano
Periodista Pares
Durante este año, la Fundación Paz & Reconciliación (Pares) por medio del proyectpEspacios Comunitarios para la PRotección y Autoprotección: Una apuesta desde los territorios, ha fortalecido su trabajo junto líderes y lideresas de diferentes zonas del país, esto a través de la articulación con la Embajada de Noruega y con organizaciones de bases que, desde hace algunos años, han trabajado con la Fundación, llevando a la creación de espacios de diálogo que cada año se ven más consolidados.
Uno de esos espacios tiene sus raíces en el Bajo Cauca Antioqueño, una subregión que ha vivido, y aún vive, la violencia de cerca. Lo anterior como consecuencia, entre otras cosas, de la histórica presencia de grupos armados. Se conoce de estructuras armadas ilegales en la zona como el Clan del Golfo, Los Caparros, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y Grupos armados porsfarc (GAPF) 18 y 36 de las extintas FARC-EP, los cuales se disputan el territorio por las rentas de economías ilegales derivadas del oro y la coca.
Por eso, se hacen cada vez más valiosas las acciones que desde la sociedad civil buscan, por un lado, exigir que el Estado cumpla con sus obligaciones y, por otro, hacer trinchera entre la comunidad que sabe las condiciones en las que se vive y le apuesta a los liderazgos sociales, a pesar de escenarios difíciles donde los grupos armados imponen las leyes.
En medio de esto nació Construyendo Paz Bajo Cauca, un espacio de diálogo que trabaja bajo la intención de diversas organizaciones de la sociedad civil de trabajar colectivamente en los procesos de defensa de los Derechos Humanos y la construcción de paz de un territorio históricamente afectado por la violencia. Desde este espacio se han priorizado procesos que permitan la socialización de la ruta de atención y protección a líderes y lideresas sociales, el trabajo de prevención de problemáticas sociales como el abuso sexual en niños, niñas y adolescentes, la deserción escolar, el embarazo a temprana edad y el reclutamiento forzado de menores de edad. Esta priorización de esta población se da debido a que la mayoría de las personas que integran el espacio son mujeres y a su vez madres.
En Construyendo Paz Bajo Cauca confluyen ocho organizaciones sociales, especialmente, organizaciones de víctimas de los municipios de Caucasia y Tarazá. Estas organizaciones son: Asociación de Desplazados y Mujeres Cabeza de Hogar Víctimas de la Violencia Jesús da Vida – ADMUCAJEVI-, Asociación de Desplazados del Bajo Cauca -ASDEBAC-, Asociación de Víctimas Vulnerables por la Paz- ASOVIVPAZ-, Red de Organizaciones Sociales y Campesinas del Norte y Bajo Cauca, Asociación de Víctimas Constructoras de Paz -ASOVICTPAZ-, Asociación de Víctimas unidas por la paz, Asociación de víctimas de Margento y Asociación de campesinos víctimas de Caucasia.
Estas organizaciones han puesto su disposición para trabajar en comunidad; conociendo las otras organizaciones que hacen parte de la subregión, identificando a las personas que las integran y poniendo en común las causas que las mueven y, asimismo, los riesgos que viven a raíz del contexto que se vive en el Bajo Cauca.
Por eso, desde Pares, y con apoyo de la Embajada de Noruega, se han fortalecido las herramientas que permitan que entre las lideresas y los líderes se implementen acciones de protección, en la que no solo sean las instituciones las implicadas directamente, sino que desde la población civil y como parte del reconocimiento a sus saberes y potencialidades, sean ellos y ellas quienes participen en la construcción de la propuesta de acciones de autoprotección. Esto, eso sí, sin dejar de lado la responsabilidad del Estado, que, a pesar de su obligación con la seguridad de las personas líderes, han dejado copar de grupos armados diferentes zonas del país.
Es por esto que desde Construyendo Paz Bajo Cauca se han adelantado actividades autónomas y en el marco de este año han realizado cinco talleres con niños, niñas y adolescentes en diferentes sectores del municipio de Caucasia; un encuentro con mujeres rurales en el municipio de Tarazá; un taller de Autocuidado; una reunión con actores estratégicos y, además, participaron en la conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de las Violencias hacia las Mujeres.
Estas lideresas y líderes que hacen parte de Construyendo Paz Bajo Cauca, esperan para el año próximo continuar su trabajo en el territorio, sumando más personas líderes de la subregión y promoviendo mejores escenarios de seguridad para quienes día a día le apuestan a proteger a la comunidad.
EXCELENTE MATERIAL, ME GUSTO LA INFORMACION