Por: Redacción Pares
Para tener certeza de la grave situación de amenaza que están viviendo los pueblos indígenas en el país, basta con repasar las cifras: en lo que ha corrido del nuevo gobierno van 190 asesinatos de líderes, autoridades y guardias indígenas. Esta semana 13 personas indígenas fueron asesinadas entre los días 29 y el 31 de octubre.El 29 de octubre cinco miembros de la Guardia y Autoridad tradicional, en Tacueyó, Cauca; el 31 de octubre cuatro personas asesinadas en Corinto, Cauca; dos Kamentzá en Putumayo; un Guardia, Embera de Chigorodó, Antioquia; y un indígena Wiwa en la Sierra Nevada de Santa Marta. Además, este domingo se denunció el asesinato del lider social coordinador de la Guardia Indígena en Tacueyó, Jesús Eduardo Mestizo Yosando, uno de los más representativos del Paro campesino en la región.
Por consiguiente, la Organización Nacional Indígena ONIC, convoca a todos los pueblos indígenas y a todos los ciudadanos a lo largo y ancho del país a que se unan en una gran movilización nacional en el Paro programado para el próximo 21 de Noviembre. Además, los pueblos indígenas mediante comunicado difundido por el Consejero Mayor de la ONIC, Luis Fernando Arias, solicitan al presidente Iván Duque la renuncia inmediata del Ministro de Defensa Guillermo Botero, «por su incapacidad para dar garantías efectiva para la vida los líderes y comunidades en los territorios.»
Las organizaciones indígenas del orden local, regional y nacional manifiestan que siguen en defensa del territorio, la vida y la paz como Pueblos Indígenas y manifiestan que existe un grave incumplimiento de los acuerdos de paz que están llevando al incremento de los cultivos de marihuana y coca en todo el territorio nacional, en especial en la zona norte del departamento del Cauca.
«Ante esta situación, las autoridades indígenas y las guardias en su ejercicio de control territorial y la autonomía enmarcada en las Leyes de Origen, la Constitucional Nacional y los tratados y convenios internacionales han sido perseguidos, amenazados, asesinados y masacrados. Al Estado Colombiano le exigimos que pare el desangre de los Pueblos Indígenas que se configura en un GENOCIDIO. En virtud de ello, exigimos adoptar las medidas necesarias para superar la grave Situación de Emergencia Humanitaria, Social, Económica y Cultural que sufren los pueblos indígenas del Cauca y todos los Pueblos Indígenas de Colombia. » señaló la ONIC.
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