Cada declaración que hace Donald Trump sobre Venezuela eleva la tensión y hace que surjan nuevos interrogantes sobre una probable invasión de Estados Unidos al vecino país. La oposición venezolana, en donde el partido Primero Justicia es la fuerza más importante, no está dispuesta a negociar y quiere la salida inmediata del chavismo. Pero Maduro, al menos aparentemente, no parece estar preocupado.
El pasado domingo hubo alfombra roja en el Teresa Carreño, se estrenaba oficialmente la segunda temporada de la serie “Nicolás, de Yare a Miraflores”, la historia sobre la vida del que muchos llaman dictador. Al estreno asistió el director de la serie, Greizon Chacón quien resaltó “Toda una vida de lucha sindical, para nosotros es gratificante contribuir a la memoria histórica de Venezuela”. Eso sí, el invitado estrella fue Maduro quien llegó mientras sonaba un disco de los Doors. Con el puño en alto, saludó a sus seguidores que fueron en masa al que es considerado el teatro más importante en la historia de Venezuela. El presidente llegó acompañado de su esposa Cilia Flórez y se sentó a ver los dos primeros capítulos en donde se muestra cómo fue el encuentro con quien sería su mentor y se constituiría, según la serie, en su máximo inspirador, Hugo Chávez. El encuentro entre ambas figuras se da en la cárcel de Yare, donde Chávez comienza a construir su movimiento.
La serie no tiene demasiados méritos dramatúrgicos, es propaganda pura y dura, una de esas producciones que suelen hacer los regímenes totalitarios para engrandecer a sus líderes. Incluso mezcla, de manera torpe, confusa, imágenes documentales con las puestas en escena. Una vez terminó la sesión, Maduro se subió a la tarima y lanzó dardos contra Trump “Hemos superado todo, guerras psicológicas. No fue Chávez y hoy no es Maduro, es una fuerza huracanada de un pueblo que se ha hecho indestructible”. La serie insufló al presidente Maduro de valentía y afirmó que, tal y como se ve en la pantalla, “esta fuerza de amor, de lucha y resistencia no sucumbirá ante las amenazas de Washington”. Cilia Flórez también subió a la tarima y afirmó “que esta revolución llegó para quedarse y falta mucho para contar”. Cilia es un personaje central dentro de la historia.
El actor que interpreta a Maduro se llama Jesús Moros y dijo: “Si algo nos ha demostrado el presidente, es el profundo amor a Venezuela”. El estreno de la segunda temporada de la serie sobre Maduro se dio justo cuando este cumplía 64 años. Mientras todo esto pasaba, del otro lado del continente, antes de subir a su Air Force One, Donald Trump lanzó una advertencia fría, contundente: “Si tenemos que hacerlo por las buenas, bien, si tenemos que hacerlo por las malas, también”.
Maduro no se da por entendido, asiste a estrenos de películas, baila desafiante un reguetón hecho para resistir una invasión, y espera, confiado, que los barcos norteamericanos se vayan del Caribe. Lograr una negociación con Trump será clave para mantener su gobierno.



