top of page

Todos los males caen sobre Cuba

Por: Redacción Pares




Uno de los coletazos que Estados Unidos esperaba trajera la disolución de la Unión Soviética a finales de 1991 era la caída de los Castro en Cuba. Sin la URSS la isla quedaría demasiado aislada y a 90 millas de las costas de la Florida. Sería cuestión de horas, decían. Ni siquiera la retórica de Fidel Castro logró frenar la angustia que llevó a cientos de miles de personas a irse en cualquier cosa que flotara hasta la Florida. La isla entró en lo que se conoció como El periodo especial. Contrario a lo que se pensaba el régimen sobrevivió. Uno de los problemas que presentó, además de los recortes sensibles en la libreta alimentaria, fueron los apagones. Desde ese momento cuatro apagones totales ha vivido la isla. El pasado viernes 18 la crisis energética que ya venía viviendo algunas provincias de Cuba -con apagones de 20 horas diarias- llegó al paroxismo cuando la central termoeléctrica Antonio Gutierrez, ubicada en Matanzas, colapsó. Esto produjo un apagón masivo que afecta a los 10 millones de habitantes de la Isla y que se ha prolongado por 72 horas.

 

Las siete termoeléctricas que tiene la isla están quedando obsoletas. Estas sobreviven desde la época de la URSS, incluso fueron construidos por soviéticos que vivían en la isla. Es difícil que se pueda revertir, a corto plazo esta situación. Pero lo peor está por venir. La naturaleza también se ensaña contra Cuba. Este fin de semana se confirmó que de acá al miércoles 23 de octubre el huracán Oscar agitaría la isla con sus vientos de 140 kilómetros por hora. El presidente Miguel Díaz-Canel afirmó que se está “trabajando duro” para “proteger a la gente y a los recursos económicos” ante la llegada del huracán.

 

La situación en la Cuba podría agravarse con el correr de las horas. El apagón está afectando hospitales donde hay pacientes que requieren de atención constante. Las industrias y las escuelas están cerradas. Según el director de Energía Eléctrica del ministerio de Energías y Minas, a través de su cuenta de Instagram, dejó un mensaje poco esperanzador: “No hay un tiempo fijo para reestablecer todo el sistema”. Hasta el momento los trabajos que se han hecho desde el ministerio de minas han podido reestablecer el 20% del servicio en la isla.

 

Dede 1962, con el gobierno de Kennedy, la isla sufre un bloqueo por parte de Estados Unidos debido a su decisión de convertirse en un estado socialista. Más de sesenta años después ha mostrado avances significativos en educación, ciencia, artes y deportes, pero existe un cansancio adquirido, en parte por el bloqueo y en parte por la decisión que tuvo en su momento Fidel Castro y ahora la misma dirigencia, de dar cambios que alivien la situación de ahogo que domina la isla. El apagón y el huracán es una combinación que pondrá a prueba, una vez más, la resistencia de los cubanos.

Comentarios


bottom of page