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SALVE SU VOTO POR COLOMBIA: CINCO CLANES POLÍTICOS

Por: Redacción Pares


A tan solo dos días de las elecciones locales y regionales en Colombia, y con los resultados de las últimas encuestas, se podría hacer una gran conclusión: el éxito de la derecha radical y de la izquierda y centro izquierda en el 2018 no se repetirá de nuevo en el 2019. Las viejas estructuras políticas se han agrupado y todo parece indicar que serán las grandes ganadoras en las locales. Hay regiones donde las viejas estructuras políticas, van a barrer con más del 70% de los votos, donde literalmente pues no habría que hacer elecciones porque van a ganar alcaldías, gobernaciones, y no van a tener prácticamente oposición”, indicó Ariel Ávila, subdirector de Pares. A continuación, encontrará enumerados cinco (5) clanes políticos de Tumaco, Sucre, Santander, Norte de Santander y Chocó.


Tumaco


Tumaco, municipio del departamento de Nariño, se encuentra inmerso en una situación crítica de violencia desde la salida de la extinta guerrilla de las FARC y actualmente se ubica dentro de los primeros lugares en los índices de violencia en el país. A lo anterior se suman las múltiples y penosas administraciones municipales que llegan cada cuatro años a gobernar.

Por tal razón este municipio del pacífico nariñense es objeto de especial observación por considerarse un botín electoral para los caciques políticos locales. De acuerdo con las investigaciones realizadas por la Fundación Paz y Reconciliación -Pares, actualmente tienen presencia en el municipio un clan político y dos grupos de caciques electorales que no han logrado posicionarse más allá del municipio.


La ausencia de clanes políticos se debe a que los distintos proyectos políticos no logran consolidarse a nivel departamental, o son deteriorados en ese proceso por investigaciones judiciales contra distintos integrantes de la estructura política que se intenta consolidar. Así, estos no han podido igualarse a figuras políticas de carácter nacional que sí han sido considerados clanes políticos en el departamento de Nariño. No obstante, estos cacicazgos son unos aliados valiosos para la consolidación de los clanes y el fortalecimiento de sus propias estructuras políticas de cara a las elecciones locales.



Tumaco cuenta con un clan político en decadencia y dos cacicazgos políticos claros en el departamento. El primero es encabezado por el exrepresentante a la cámara por el Partido Liberal, Neftalí Correa Díaz; mientras que los cacicazgos se encuentran en cabeza de del dos veces alcalde de Tumaco, Nilo del Castillo Torres, y, finalmente de un frente de caciques políticos conformado por el actual alcalde Julio César Rivera y los exalcaldes Víctor Arnulfo Gallo Ortíz y Newton Valencia.

Santander


El departamento de Santander se ubica en la región centro-oriente del país, limita al nororiente con Norte de Santander, al norte con Cesar, al sur con Boyacá, al occidente con Antioquia y al noroccidente con Bolívar. Históricamente ha sido un bastión del Partido Liberal que fácilmente se hacía con la victoria sobre el Partido Conservador, tanto en la gobernación como en la alcaldía de la capital.


El liberalismo santandereano llevó al escenario nacional a figuras como Horacio Serpa, Luis Carlos Galán y Alfonso Valdivieso. A finales de los 90 e inicios de los 2000 llegó al departamento el paramilitarismo impulsando un proyecto político materializado en el partido Convergencia Ciudadana, volteó el tablero político y rompió con la hegemonía liberal. Convergencia Ciudadana es el punto de partida de todos los clanes políticos en Santander, desde ahí se impulsaron las carreras políticas de cuestionados como Luis Alberto ´El Tuerto´ Gil, el coronel Hugo Aguilar y del actual gobernador, Didier Tavera.



Este partido nació en 1997 de la mano de Luis Alberto Gil, posterior a su proceso de desmovilización de la guerrilla del M19. En noviembre de 2009 se tomó la decisión de cambiar el nombre del partido y unificarlo con varios partidos y movimientos políticos igual de cuestionados por los lazos de sus integrantes con el paramilitarismo, estos fueron el Movimiento Popular Unido (MPU), el Movimiento de Inclusión y Oportunidades (MIO) y Colombia Viva.


Ya en el junio de 2013 el PIN volvió a tomar la determinación de cambiar el nombre de la colectividad para volver a alejarse de los escándalos de parapolítica, junto a otros cuestionamientos de sus congresistas en investigación por la Corte Suprema de Justicia y convertirse en el tercer gran partido en el congreso de corte uribista, después del Partido Conservador y el Partido de la U. Así, adoptaron el nombre Opción Ciudadana que mantienen hasta la actualidad. Según la investigación de la Fundación Paz y Reconciliación -PARES, a 2019 existen tres clanes políticos en el departamento: El clan de los Aguilar, el clan Tavera y por último, el clan de Iván Díaz Mateus.


Sucre


El departamento de Sucre, ubicado en la región Caribe, ha sido gobernado durante las últimas décadas por Clanes políticos y económicos relacionados, directa o indirectamente, con grupos armados ilegales, así como con diversos casos de corrupción del orden local, regional y nacional. Las familias, fundamentalmente, son el eje sobre el cual se ha cimentado el poder en esta región del país, distribuyendo para sí y para sus aliados las arcas gubernamentales.



La Fundación Paz & Reconciliación (Pares) ha escudriñado desde 2014 las elecciones del orden nacional y local, en relación con el comportamiento electoral del departamento de Sucre, los principales Clanes políticos y las dinámicas de corrupción. El presente informe plantea una actualización reciente sobre la situación de cada Clan del departamento; si se encuentran en supervivencia, en decadencia, o si se mantienen, mediante una breve revisión histórica del Clan, sus dominios electorales y las apuestas para el presente año.


En suma, son 3 clanes políticos que tienen su seno directamente en el departamento: el Clan Acuña, Clan García Romero y Clan Guerra Tulena; y 2 Clanes que tienen injerencia indirecta: el Clan Ñoñomanía y Clan Chaguí-Pestana-Lyons.

Norte de Santander


El departamento de Norte de Santander, ubicado al nororiente del país en la región fronteriza con Venezuela, es uno de los territorios colombianos con mayor afectación por el conflicto armado. La subregión en donde se concentran la mayoría de los actores armados es el Catatumbo. Esto se debe a que no solo es un corredor estratégico, en la frontera colombiana, sino también porque en esta zona hay actividad petrolera y cultivos de uso ilícito.



La suma de esos elementos hace que la disputa por el territorio y el control político se agudice; por lo tanto, muchas de estas estructuras terminan por penetrar la política departamental. Durante la última década, el control político del departamento ha estado en manos de dos clanes: el clan Villamizar-García y el clan de Ramiro Suárez.


En ellos, si bien hay poderes afianzados, como el de Ramiro Suárez en Cúcuta, no dudan en aliarse cuando se trata de obtener la gobernación. De estos dos clanes, el primero viene fortaleciéndose, mientras el segundo no ha variado significativamente en su poder, lo que se expondrá en el siguiente apartado. No obstante, hay una tercera fuerza que viene tomando vuelo en el departamento: se trata del partido Centro Democrático.


Chocó


La política en el departamento del Chocó ha estado marcada a fuego por la presencia de clanes políticos. Estos, en su mayoría, responden a cacicazgos políticos de familias tradicionales quienes han participado del poder desde la fundación del departamento y que, adicionalmente, se caracterizan por su relación directa o indirecta, con grupos armados y economías ilegales, así como con su participación en escándalos de corrupción durante sus administraciones.


En particular, la política del Chocó ha sido fuertemente influenciada por la presencia de estructuras paramilitares entre las que se ha destacado la del bloque Élmer Cárdenas, de alias “el alemán”, y los pactos políticos que realizaron los clanes políticos con estos grupos armados ilegales para participar del poder local. Durante la época de elecciones, estos grupos se disputan las alianzas con las estructuras de estos clanes, y, en algunas ocasiones, participan en cuerpo ajeno, es decir ponen candidatos en su nombre y bajo sus condiciones.

Con base en las investigaciones de la Fundación Paz & Reconciliación – Pares, este informe presenta el estado de los clanes del departamento desde el año 2010 hasta la actualidad; evidenciando su fortaleza, ecadencia o su permanencia respecto a su poder local y dominio electoral. Asimismo, se realizará una breve reseña de sus apuestas para las elecciones locales de octubre del 2019 y sus prospectivas respecto a estos comicios. Desde el año 2010, se reconoce la presencia de tres (3) clanes políticos: Clan Cordobismo, Clan Sánchez Montes de Oca y Clan Torres.

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