Por: Ariel Ávila, Subdirector de la Fundación Paz y Reconciliación-Pares
A casi dos meses de la primera vuelta presidencial, al menos dos cosas son una realidad. La primera es que el tema de Venezuela se nos metió de la A hasta la Z en la disputa electoral. Algunas campañas políticas dieron un giro increíble, de la idea falsa de que Santos le entregó el país a las Farc y de que las Farc estaban lavando dinero de caletas para comprar votos y tomarse el país solo queda el recuerdo. Esto que para expertos parecía un chiste, era lo que se creía en una gran parte de la sociedad colombiana, sin embargo, el pasado 11 de marzo, las Farc apenas lograron el 0,34 por ciento de los votos, poco más de 50.000. Con lo cual este argumento quedaba en el piso y se comprobaba que todo era una estrategia para crear pánico.
Hace algunas semanas, cuando ya se sabía que esta teoría era ridícula, los estrategas de algunas campañas políticas decidieron pasar del monstruo de las Farc al de Venezuela, y tan solo en unas horas, la población asimiló el cambio de teoría. Esta nueva línea de opinión que busca sacar a la gente a votar con pánico se ha instaurado y parece claro que todo aquel que no apoye a Duque es una amenaza castrochavista.
La otra realidad es que hasta el momento la campaña que más asume comportamientos y posturas populistas y castrochavistas es la de Iván Duque, es decir, la misma que dice que nos defenderá y protegerá de convertirnos en otra Venezuela. Solo daré tres ejemplos.
El primero fue el trino del expresidente y actual senador Uribe hace algunos días. Decía lo siguiente:
Daniel Coronel, político y contratista de Santos, tiene pánico y con razón; un Gbno de Iván Duque manejará con transparencia las concesiones de televisión— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) 18 de marzo de 2018
Como se lee es una amenaza directa a la libertad de expresión y a la libertad de prensa, al mejor estilo de Venezuela cuando salió del aire RCTV. El 27 de mayo de 2007 la cadena privada Radio Caracas Televisión apagó su señal a las 23.59 de la noche, hora Caracas. No hubo cierre militar de RCTV, no hubo una violación a la ley, nada de eso, sencillamente el Estado venezolano no renovó la concesión de frecuencia estatal y debió salir del aire. Para muchos era un derecho legítimo del Estado, para otros se trató de una censura indirecta. En todo caso, allá esto comenzó como lo escribió Álvaro Uribe: dando argumentos indirectos para justificar su salida del aire. Si así es en campaña, imagínenselos gobernando. Es decir, en plena campaña amenazan con sacar del aire un canal. ¡Se tienen mucha confianza!El segundo ejemplo es el populismo económico. El candidato Iván Duque hace unos días propuso 6 días sin IVA al año en Colombia, con la idea de reactivar el comercio. Sin embargo, esto es inviable, es casi imposible de hacer y si se hace, el país sufrirá económicamente. Me explico mejor. Standard and Poor’s redujo la calificación del país a BBB- pues se advierte un riesgo grave en nuestra economía, además la deuda colombiana está en el 47 por ciento del PIB, muy alta, y la economía no termina de arrancar, la última reforma tributaria golpeó mucho el consumo en Colombia. Reducir los impuestos de la noche a la mañana solo agravaría la situación y el desbalance sería grave.
Aunque a los ciudadanos les gusta que les digan que los impuestos se van a reducir, en la vida real es una mentira y el hacerlo en el corto plazo sería peor que mantenerlos. De hecho, el único que ha dicho que no hará populismo con los impuestos es Sergio Fajardo. Pero para el caso de Iván Duque es populismo puro y duro.
Un tercer ejemplo, es el desconocimiento de los fallos judiciales. La periodista Yolanda Ruíz le preguntó a Duque sobre si respetaría, en caso de ser presidente, la decisión de una investigación formal contra Álvaro Uribe, el candidato dijo que él sabe que eso nunca va a pasar, y dijo textualmente:
“…yo soy una persona que está convencida de la honorabilidad de Álvaro Uribe…Hay que saber identificar la injusticia y lo que he visto claramente es que con el presidente Álvaro Uribe ha habido una gran injusticia”, luego dice que mete las manos al fuego por Uribe y su honorabilidad. No debe olvidarse que el debate se abrió luego de que se conocieran versiones de que Uribe mandó a matar a su amigo Pedro Juan Moreno saboteando un helicóptero.
Al mejor estilo populista Duque desconocerá cualquier fallo, lo típico de cualquier gobierno autoritario, queda claro que limitará la justicia, la obstruirá, al igual que lo hizo Uribe en sus gobiernos, cuando infiltró la Corte Suprema, o armó complot contra el magistrado Iván Velázquez. De entrada deja claro que para él habrá una justicia selectiva.
Bueno ciudadanos y ciudadanas, en la vida real, cual es el candidato populista y autoritario, o mejor el más peligroso para Colombia… juzguen ustedes.
Nota aclaratoria: el presidente peruano PPK renunció por el escándalo de Odebrecht y no se les olvide que el candidato Duque ha salido salpicado en el mismo escándalo…
Publicado en Revista Semana
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