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Para Petro es mejor tener de asesor a Benedetti que aliado de Vicky Dávila

Por: Redacción Pares




Basta con ver la hoja de vida de Armando Benedetti para ver su poco apego que ha tenido con las causas que ha militado. Empezó siendo liberal, un aliado incondicional de Germán Vargas Lleras a finales de los años noventa, después de su breve paso como periodista en QAP. Luego abrazó con fervor la causa uribista. Promovió incluso una segunda reelección. Luego, cuando los vientos cambiaron, se alineó con Juan Manuel Santos. Volvió a ser miembro de la U, hasta que en el 2020 fue expulsado de esta colectividad después de que decidiera, junto a Roy Barreras, no apoyar la causa a favor del entonces presidente Duque.

 

Entonces terminaron en el Pacto Histórico. Ayudaron a Petro a romper con sus límites de 8 millones de votos y con poco más de 11 pudieron derrotar a Rodolfo Hernández en segunda vuelta. Se convertía en el primer presidente de izquierda elegido democráticamente en Colombia. A Benedetti lo premió con la segunda embajada en importancia, Venezuela, que, además tenía una ventaja para él: la reactivación económica. Sin embargo su comportamiento se convirtió, según le comentó el gobierno Maduro a la cancillería, entonces en cabeza de Alvaro Leyva, en un problema de seguridad nacional. Los audios filtrados a Semana en donde insulta a Laura Sarabia provocaron su salida. Petro, incapaz de soltarle la mano, se lo llevó a ser embajador de la FAO en Roma. Ahora, después de darle otra exclusiva a Semana en donde afirma que se someterá a una cura de desintoxicación debido a sus adicciones, regresó a Palacio a ser uno de los asesores presidenciales.

 

Esta decisión no ha caído bien en el entorno del presidente. Por eso analistas han lanzado hipótesis sobre esto. León Valencia, director de la fundación Paz y Reconciliación se atrevió a lanzar una de ellas a través de sus redes sociales. En ella deja claro que el presidente teme que Benedetti pudiera cambiarse una vez más de piel e irse a las toldas de Vicky Dávila: “¡Cómo es de irónica la vida! El lanzemiento de Vicky Dávila a la presidencia revalorizó a Armando Benedetti, visto que podría convertirse en un arma mortal en manos de Vicky, decidieron atraerlo ¿Para controlarlo? Dificil tarea con un costo muy alto en la opinión y en las propias filas del Pacto Histórico”.

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