Por: Daniela Quintero. Redacción Pares
A lo largo de los debates que se desarrollaron en la plenaria del Senado en el marco del debate a las objeciones presidenciales, dos senadoras y el secretario general del Senado fueron el centro de todas las miradas este jueves por sus sorprendentes reacciones.
Desde febrero, cuando el presidente Iván Duque decidió objetar seis (6) artículos de la ley estatutaria de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), mecanismo creado a partir de los Acuerdos de Paz, se reabrió el debate entre los defensores y detractores del pacto con la exguerrilla Farc.
La bancada de gobierno estuvo haciendo ‘lobby’ con varios congresistas para lograr avalar las objeciones del presidente, mientras que la de oposición las rechazó de inmediato, puesto que, como lo han argumentado las objeciones a esos puntos son inconstitucionales y no de inconveniencia.
Así las cosas, el lunes pasado inició el debate en Senado, pero no llegó a buen puerto. Sesionaron hasta altas horas de la noche y lo único que lograron discutir fue la serie de impedimentos y recusaciones entre los congresistas.
El martes reabrieron el debate y ocurrió lo inesperado. Alrededor de cinco congresistas se retiraron del recinto y perjudicaron la votación de la sesión que por fin iba a dar luz verde a la ley de procedimiento de la JEP, puesto que, ya había sido aprobada semanas atrás en la Cámara de Representantes.
Las senadoras Maritza Ramírez, del partido de la Unidad Nacional; y Ana María Castañeda, del partido Cambio Radical, ambos aliadas al Acuerdo de Paz firmado en noviembre de 2016, fueron las congresistas que generaron más rumores debido a que sus partidos se comprometieron a defender cualquier movida política relacionada con el pacto.
¿Quién es Maritza Martínez Aristizabal?
Martínez es abogada de la Universidad Externado de Colombia e inició su vida laboral en el sector público en el departamento del Meta. Sin embargo, desde el 2007 se preparó para lanzarse a la vida política. La actual senadora del partido de la U llegó al recinto en el 2010 con una de las votaciones más altas de su bancada. Representó a la región de la Orinoquía, y en los dos siguientes periodos volvió a ser elegida
De acuerdo con Esteban Salazar, investigador Fundación Paz y Reconciliación-Pares, el esposo de Maritza Martínez, Luis Carlos Torres estuvo investigado por relaciones con grupos paramilitares en el Meta, pero un fallo de la Corte Suprema de Justicia lo absolvió. Asimismo, fue inhabilitado por la Procuraduría durante 10 años debido a malos manejos en la contratación cuando ocupó el cargo de gobernador del Meta en 2001.
“Maritza hace parte de un partido de gobierno que es de la U entonces votar o no, no hay un incentivo de mermelada. Ella tiene sobre todo una gran cantidad de poderes en el Meta, entonces la mayor cantidad de cosas que puede negociar es en el Meta”, expresó Salazar, en ese sentido, no es tan relevante su salida del recinto.
¿Y cuáles son las conexiones de Ana María Castañeda?
La senadora del partido Cambio Radical es administradora de empresas y especialista en gerencia pública de la Corporación Universitaria del Caribe (CECAR). De acuerdo con información de su página web, en el año 2005 representó al departamento de Sucre en el Concurso Nacional de Belleza.
También fue gestora social del municipio de Sincelejo durante el período 2012-2015, por lo cual es reconocida por su gestión cultural en dicha región.
“Ella es nueva, es exreina y nunca ha hecho política en su vida. Su esposo se llama Alberto Mario Fernández, excongresista por el Partido Liberal”, indicó Salazar.
El investigador agregó que a pesar de que Fernández fuera de un partido distinto le consiguió el aval a su esposa con acuerdos del “Clan Char” para que ella pudiera llegar al Senado.
“En este momento su esposo quiere aspirar a la Alcaldía de Sincelejo en compañía de Yahir Acuña. Y Yair espera lanzarse a la gobernación de Sucre”, resaltó.
Acuña ha sido señalado de tener relaciones con parapolíticos y actualmente tiene una investigación abierta por parapolítica. Lo curioso es que el partido de la U le abrió un espacio a Acuña desde que su partido Opción Ciudadana perdió personería jurídica.
Así las cosas, “lo que Castañeda pudo estar negociando son posibles investigaciones abiertas contra su esposo en la Fiscalía o contra Yahir acuña”, según detalló Salazar, tras la repentina salida de la senadora en plena votación de las objeciones.
Castañeda es apoyada por los Char y dicho clan político se está abriendo del Vargasllerismo, por lo tanto, se están acercando a Duque. Entonces en los otros departamentos donde ellos puedan o no tener cuotas burocráticas, la senadora responde a lo que le diga el Clan Char porque ella llegó apadrinada y financiada por ellos.
“Entonces el Clan Char que ahorita es cercano a Duque pudo haber hecho presión para que ella se saliera”, puntualizó.
Tras el episodio, Castañeda fue objeto de críticas en redes sociales. Por lo tanto, respondió desde su cuenta de Twitter que me “consideré y sigo considerando como defensora ultranza de los postulados de la paz, que cada objeción amerita ser discutida de forma individual, ya que cada una tiene una unidad sustancial distinta y el análisis requería de mayor puntualidad”.
Sin embargo, ella sentó un rechazo horas antes con las directivas en la reunión del partido, yendo en contra de la directriz de Vargas Lleras. En ese sentido, atendió la directriz de los Char que ahora están con Duque.
El secretario del Senado Juan Gregorio Eljach
Eljach inició su carrera política directamente en el Senado como asesor del exsenador Aurelio Iragorri. Ya en 2012 se desempeñó como secretario general de Senado, cargo que ocupa hasta la actualidad.
“Él es uno de los que más tiene pode. De hecho tiene más poder que cualquier presidente del senado porque él es el que define todo el tema normativo y de interpretación. Sin embargo, tiene escándalos por acoso dentro de la secretaría”, expresó el investigador.
Elijach es el que interpreta la ley quinta, en ese sentido, “es el guardián” de la ley quinta, la cual establece todo el estatuto orgánico del trámite legislativo de los proyectos del acto legislativo, proyectos de ley ordinaria y proyectos de ley estatutaria en el Congreso.
Esa misma noche del martes, se enfrentaron con el senador Jorge Robledo, del Polo Democrático debido a los resultados obtenidos en la sesión. Las votaciones fueron de la siguiente manera: 47 votos en rechazo a las objeciones, 34 a favor de las mismas.
Para la bancada del gobierno hubo confusiones en el conteo, mientras para la oposición era clara la victoria. De acuerdo con la norma, un texto en discusión se aprueba o se rechaza, solo si la mitad de los integrantes de la sesión más uno, están presentes.
Y debido a que 14 congresistas estaban impedidos el quórum fue de 92 senadores. Por lo tanto, el resultado fue exacto. La bancada opositora aplaudió el resultado, sin embargo, la salida de Martínez y Castañeda encendieron a los partidos oficiales.
Ante el alboroto, Elijach empezó a discutir con el senador Jorge Robledo del Polo Democrático y aunque se mantuvieron en la pelea normativa, el debate se salió de tono. Como no se llegó a un consenso acabaron la sesión y el miércoles en otro episodio, el secretario fue protagonista de un acto bochornoso.
Elijach no se dio cuenta que tenía abierto el micrófono y a su lado estaba una compañera de la mesa de la secretaría del Senado y le dijo: “ábrete”, seguido de un movimiento en su pecho; al percatarse, intentó disimular su acción y empezó a cantar para esconder su comportamiento.
En definitiva, hubo actuaciones inesperadas de los integrantes del Senado. Sin embargo, esta tarde del jueves se conoció que las mayorías de la Cámara Alta dejaron una constancia de retiro de la sesión.
En ese sentido, será la Corte Constitucional quien defina el futuro de la ley de procedimiento de la JEP.
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