top of page
  • Foto del escritorLínea gobernabilidad y democracia

Estas son las 9 principales accciones del próximo gobierno

Por: Daniela Garzón, Investigadora Nacional

Línea de Investigación en Democracia y Gobernabilidad

Gustavo Petro y Francia Márquez alcanzaron una victoria inédita e histórica para la izquierda colombiana. Con aproximadamente 11’185.671 votos, según el preconteo de votos en un 98,86%, correspondiente al 50,49% aproximado del total de votantes, llegará el Pacto Histórico (PH) a la Casa de Nariño después de una campaña especialmente intensa en las últimas semanas, en la que se conocieron toda suerte de estrategias de guerra sucia pero también en la que Rodolfo Hernández perdió en su competencia contra sí mismo, pues no logró recoger todos los votos de Federico Gutiérrez. El camino para Petro no será fácil, pues su programa de gobierno es muy ambicioso, tiene un énfasis en los sistemas públicos en todos los sectores y plantea cambios sustanciales, incluyendo una reforma tributaria de 5,5 puntos del Producto Interno Bruto (PIB) anuales.


Su programa titulado “Colombia, potencia mundial de la vida” no incluye la idea más polémica que lanzó durante su campaña, la de decretar un estado de emergencia económica para atender el problema del hambre en Colombia. Según las declaraciones que le dio en su momento a Blu Radio, “la emergencia económica podría facultar al Estado para comprar cosechas de campesinos, pequeños y medianos productores agrarios de alimentos, proteger producciones alimenticias en Colombia”

El estado de emergencia económica, social y ecológica, es uno de los tres tipos de estados de excepción que contempla la Constitución colombiana, y según ella puede ser declarado por el presidente, si sobrevienen hechos que perturben, o amenacen con hacerlo de manera inminente, el orden económico, social y ecológico del país o que impliquen una calamidad pública. Este estado le permite al presidente dictar decretos con fuerza de ley, durante máximo treinta días y puede declararse únicamente tres veces al año. Los decretos tienen control automático de la Corte Constitucional.


Por otro lado, Petro también ha empezado a hablar de un “Gran Acuerdo Nacional” para, según explicó el viernes pasado, acompañado de buena parte de las personas que se congregaron en su campaña, “construir una unidad dentro de la diversidad (…) un acuerdo plural multicolor”. De acuerdo con su jefe de debate y exsecretario de Santos, Alfonso Prada, la idea es continuar el diálogo sobre la propuesta de ese acuerdo nacional.


Ahora bien, de las propuestas incluidas en el programa de gobierno del Pacto Histórico, las más importantes, retadoras y en las que tendrán que empezar a trabajar desde el 7 de agosto son:


1. Reforma tributaria


Colombia es un país que constantemente hace reformas tributarias. Solo durante el gobierno de Iván Duque se tramitaron tres y una fue retirada sin haber pasado por el Congreso, después de algunos días de paro nacional. El lugar de encuentro de múltiples expertos ha sido el de la falta de “una reforma tributaria estructural” que ataque los tratamientos tributarios especiales, la evasión, y se concentre en impuestos progresivos, es decir, aquellos que buscan que pague más quien más tiene.


La propuesta del programa del PH incluye desmontar gradualmente beneficios tributarios “sin justificación económica”, con la promesa de avanzar en la brecha entre lo que debería pagar alguien y lo que en realidad paga.


También incluye eliminar las rentas cedulares —aquellos ingresos provenientes de intereses, rendimientos financieros, arrendamientos, regalías y explotación de la propiedad intelectual para cobrar los mismos impuestos a “rentas laborales, dividendos y ganancias ocasionales”. Otro de los asuntos que aborda es el de obligar a las empresas a repartir dividendos “en un porcentaje cercano al 70%” y gravarlos. También se promete no extender el IVA a la canasta familiar.


Según algunos analistas, esta propuesta pretende recaudar lo que no ha recaudado otra reforma tributaria en el pasado, lo que podría ser inviable, y aunque se propongan poner la carga tributaria más en las personas naturales que en las empresas, sería importante mirar las magnitudes de los mismos.


Dentro del programa de gobierno no se incluye una propuesta polémica que Petro ha repetido una y otra vez, la de gravar a “las cuatro mil personas más ricas de Colombia”.


2. Empleo

En materia de empleo la propuesta del PH es llevar a cabo una política de empleo garantizada en la que el Estado sea un “empleador de última instancia”, como una manera alternativa al enfoque de subsidios al desempleo y a la flexibilidad laboral. Según lo descrito, el programa “reconocerá actividades como las asociadas a las labores de cuidado” y se implementará con un “salario básico para quienes no puedan encontrar trabajo de otra manera”. El programa tendría una aplicación contracíclica, es decir, cuando haya periodos de contracción económica este se expandirá y cuando haya periodos de bonanza este se contraería.


Este tipo de programas de trabajo garantizado pretenden ofrecer una solución al problema de la inflación y el desempleo, y tiene como antecedentes programas como Jefas y Jefes de Hogar Desocupados, puesto en marcha en Argentina en 2002.


3. Transición energética


Es quizás uno de los puntos neurálgicos, junto con el de la reforma tributaria, y en el que se proponen más cosas dentro del programa del PH. Aquí el objetivo es transitar hacia una economía que no dependa “del modelo extractivista”, es decir de la explotación de materias primas, particularmente petróleo y carbón; y democratizar el uso de energías limpias y renovables.


Las acciones más arriesgadas en cuanto a la transición energética propuesta son no otorgar nuevas licencias para la exploración de hidrocarburos ni para la minería a cielo abierto, prohibir el fracking y destinar la extracción de las reservas actuales de combustible fósil al consumo interno. Tampoco se harán nuevas hidroeléctricas de embalse.


Asimismo, se espera sentar las bases de la transición energética, creando un fondo para la misma con recursos de las regalías, y los provenientes de la eliminación de beneficios tributarios al sector de hidrocarburos, la minería de carbón y las hidroeléctircas. De esta forma, se espera llevar el reemplazo del parque automotor público, incentivar el uso de vehículos eléctricos, centrar en Ecopetrol la investigación, ciencia y desarrollo de tecnologías para la transición hacia energías limpias y crear el Instituto Nacional de Energías Limpias.


Quizás lo más polémico de este punto sea el de frenar la nueva exploración petrolera, pues no solo no es sencillo reemplazar la energía abundante que proviene del crudo, sino que los combustibles fósiles, según expertos como Esteban Rossi, “atraen cientos de millones de dólares en inversión extranjera y pagan impuestos”. Ecopetrol es una de las empresas que más le reporta utilidades al Estado colombiano.


4. Tierras


Uno de los principales problemas que tiene Colombia es la escandalosa concentración de la propiedad de la tierra, que se calcula en 0,82 del coeficiente Gini, en donde 1 significa todo en manos de una persona y 0 distribución perfecta. Según el Centro Nacional de Memoria Histórica “no hay mayor problema en Colombia que el agrario y la distribución equitativa de la tierra (…) que se profundizó con el conflicto armado”.


El programa de Petro y Márquez en este punto pretende “dejar atrás el latifundio improductivo” a partir de la democratización del “espacio, el crédito y el saber”, y tomar como pilar la ref