El secretario de seguridad de Fico que era colaborador de la oficina de Envigado

Por: Redacción Pares

El pasado sábado Federico Gutiérrez se rasgó las vestiduras porque en donde el evento público que llenó la Alpujarra el presidente Petro llevó a algunos miembros de las bandas criminales con las que establece desde el 2022 una negociación que ha colaborado a que se bajen, de manera histórica, los índices de violencia en el Valle de Aburrá. De un plumazo Fico borraba de un plumazo uno de los mayores escándalos de su administración: Gustavo Villegas. El 4 de julio del 2017 fue capturado el ex secretario de seguridad de Federico Gutiérrez durante su primera administración. A pesar de las evidencias, de las capturas y condenas, Fico ha negado con contundencia la verdad. El argumento que ha dado el actual alcalde de Medellín es el siguiente: “A Gustavo Villegas lo capturaron por no denunciar una extorsión de 150 millones de pesos de la que era objeto su empresa familiar. Si alguien dio la pelea contra la oficina de Envigado fuimos nosotros. Capturamos a más de 160 jefes de bandas criminales.

Pero la verdad es otra. A Villegas Restrepo se le acusa de entregar información privilegiada a cabecillas como Edison Rodolfo Rojas, alias Pichi, capturado en Panamá en el 2013 y que actualmente está en la mesa de negociación con el gobierno Petro.

La relación de Villegas con la oficina de Envigado databan del 2007, cuando el medio de comunicación Vorágine, según reseña el portal Infobae, le prestaba servicios de vigilancia a los propios paramilitares. Villegas llegó en el 2022 a un preacuerdo con la Fiscalía y por eso fue condenado a 32 meses de cárcel. En el extenso expediente que pesa en su contra Villegas negociaba con los combos para bajar muertes y robos. Según la Fiscalía era un trabajo mancomunado entre la alcaldía de Fico y la oficina de Envigado para mostrar resultados.

Villegas estuvo en las alcaldías de Medellín y gobernaciones de Antioquia en los últimos 32 meses de cárcel. Entró en la administración de Luis Alfredo Ramos, quien fue condenado por sus relaciones con los paramilitares, cuando fue nombrado secretario de hacienda.  A comienzos de este siglo, cuando el alcalde era Sergio Fajardo, fue nombrado director del programa de paz y reconciliación de la alcaldía de Medellín. Con Federico Gutiérrez ya se convirtió en su secretario de seguridad.

El pasado sábado el presidente Petro le propinó al uribismo en su casa, en su nido, un golpe tremendo, una movilización espectacular que terminó con una concentración que pocos olvidarán en el corazón del poder en Antioquia, la Aplujarra. El alcalde Federico Gutiérrez y el propio gobernador Andrés Julián Rendón les pareció poco menos que una herejía la decisión de Petro de llevar miembros de bandas criminales a ese acto olvidando que las cifras de violencia se han bajado gracias a esta negociación y que él tiene rabo de paja así como todo el uribismo: mientras fue gobernador de Antioquia Álvaro Uribe fue acusado por su supuesta cercanía con grupos paramilitares, cargos por los que aún debe probar su inocencia.

Todos tienen rabo de paja