top of page

Asociación de Mujeres por el Bienestar y Asistencia Recíproca: una apuesta de mujeres para las mujer

Por: Laura Cano

Periodista Pares


Venezuela pasa por un contexto social y político que ha agudizado todo tipo de violencias, entre ellas, las violencias contra las mujeres. Siguiendo información del Centro de Justicia y Paz, “desde el 1 hasta el 31 de mayo de 2021 hubo en Venezuela 24 femicidios consumados y seis frustrados, según los datos arrojados en el monitoreo de femicidios elaborado por el Observatorio Digital de Femicidios del Centro de Justicia y Paz (Cepaz). En el mismo periodo se registraron 6 muertes violentas de venezolanas en el exterior y un femicidio en grado de frustración”.


Además, en el marco de las migraciones que se han producido a otros países, especialmente Colombia, otras violencias se ha agudizado, como lo son los abusos sexuales y trata de personas con fines de explotación sexual. Se señalaba desde el Observatorio Venezolano de los Derechos Humanos de las Mujeres que: “Desde 2017, las mujeres migrantes por población pendular (que cruzan las fronteras frecuentemente) o porque abandonan el país, se encuentran en constante riesgo, lo que ha configurado patrones de trata y tráfico de personas, prostitución forzada, violaciones, embarazos no deseados, engaños con ofertas de trabajo de altos ingresos en divisas o traslados hacia la ciudad de destino con precios económicos”


Se cita además que: “Según el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) hubo un aumento en el lapso abril-agosto de 2020 del 7% de mujeres recibidas en albergues para mujeres víctimas de violencia sexual, trata y madres solteras en Cúcuta, Colombia; en comparación con igual lapso de 2019; por su parte la organización colombiana Profamilia manifestó haber apoyado a 573 mujeres venezolanas víctimas de violencia sexual en 2019; representando esta cifra un aumento del 92% en relación con el 2018, es decir que esta situación viene presentándose antes de la pandemia, fundamentalmente en las regiones fronterizas de La Guajira y Norte de Santander”.


Esta situación se ha profundizado dadas las pobres respuestas de los gobiernos de ambos países, y ante la atención ineficaz que se le ha dado a esta problemática. Y es que además la situación se vive en dos países en donde las violencias basadas en género no tienen el adecuado tratamiento, ni por medio de las entidades prestadoras de salud, ni por las instituciones administradoras de justicia.


Esta problemática de violencias contras las mujeres, en general, solo pareciera no ser vista por quienes institucionalmente tienen injerencia. Sin embargo, organizaciones de la sociedad civil ya le han puesto la lupa encima y han puesto en marcha acciones desde años atrás, y en estos momentos donde factores políticos y sociales agudizan el panorama.


Una de esas organizaciones es la Asociación de Mujeres por el Bienestar y Asistencia Recíproca -AMBAR-, la cual fue creada el 28 de agosto de 1995 y agrupa a mujeres, adolescentes y niñas víctimas de explotación sexual en Venezuela.


Actualmente, y tras años de trabajo, AMBAR tiene dos sedes; una en Caracas y otra en Caicara del Orinoco, en donde participan 15 personas. Nury Pernia, quien es presidenta de AMBAR, cuenta que ante la situación del país, han tenido varias veces que concentrar sus esfuerzos en atender a víctimas de trata de personas y explotación sexual. Justamente, ante lo que significa atender este tipo de casos, y las VBG en general, desde la Asociación se cuenta con un grupo de acompañamiento médico, judicial y psicológico. Adicionalmente, cuentan con un programa de preparación de lideresas en la defensa de los Derechos Humanos de las mujeres, para esto se tiene un curso que permite reconocer la Constitución, los tratados, convenios internacionales, pactos y protocolos en materia de DDHH.


Señala Nelly que “las mujeres que llegan con casos de VBG y desean interponer una denuncia por el caso, nosotras las acompañamos, sino lo desean hacer igual acompañamos su proceso desde otros espacios”. Además, desde AMBAR también se tiene participación de movilizaciones en Venezuela, como respuesta a las pocas medidas que hay para garantizar los derechos de las mujeres.


AMBAR fue una de las organizaciones que participó de la convocatoria adelantada por el Observatorio por la Defensa de la Vida, ODEVIDA, en la cual se buscaban propuestas para crear intervenciones en el marco del 25N.


Desde esta organización la propuesta consistió en ​ realizar una actividad de calle donde se realizarán performance, murales, protesta pacífica, ruedas de prensa, Twitteraton, videos, fotografías y una asamblea general en calle conjuntamente con el movimiento de Mujeres contra las Violencias que MCLV que lo conforman 15 organizaciones, colectivos y movimientos de mujeres a nivel nacional.


Lo anterior, con la finalidad de demandar los derechos humanos de las mujeres en Venezuela como:


1. La falta de programas sociales dirigidos a mejorar la calidad de vida de las mujeres

2. Sueldo digno

3. Seguridad

4. Programas de prevención de Femicidio y VBG.

5. Justicia para las víctimas de Femicidio

6. Respuesta por parte de la Asamblea Nacional a la solicitud de la despenalización del aborto en Venezuela.



AMBAR es una de las tantas organizaciones de la región que abanderan la exigencia de la garantía de los derechos de las mujeres, esto, en medio de un contexto de un país que ha sufrido varios cambios al interior de su política, que hoy no sólo profundizan una problemática, sino que además hacer ver, de forma más evidente, las barreras y violencias con las que han tenido que lidiar las mujeres del vecino del país. Hoy respaldamos el trabajo de esta Asociación que también se suma a los múltiples esfuerzos por la defensa de la vida.



bottom of page