En el año 2010 la Corte Suprema de Justicia condenó al ex senador Alvaro “El Gordo” García a 40 años de cárcel por ser uno de los perpetradores de la masacre de 15 campesinos y el desplazamiento de 246 familias en Macayepo. La masacre, cometida en los Montes de María, ocurrió el 14 de octubre del año 2000. Estuvo comandada por uno de los paramilitares más sanguinarios que han pasado por esta tierra, Rodrigo Mercado Peluffo, alias Cadena. Esto se dio en el marco no de perseguir a un grupo insurgente, de repeler a la guerrilla, sino por la ambición de latifundistas que seguían con la fiebre de acaparar la mayor cantidad de tierras posibles. La sevicia con la que asesinaron a los 15 campesinos es sólo comparada con la que el mismo grupo usó en la masacre de El Salado: con bates y palos acabaron con la vida de estas personas. Necesitaban no sólo matar sino dejar un mensaje escrito en sangre: había que dejar claro el horror. Espantar a la gente, por eso abandonaron todo lo que tenían y dejaron la tierra.
García tiene 71 años y quiere, que por su edad, lo dejen libre. Por eso pidió ante la Corte, donde compareció el pasado 2 de abril, lo siguiente: Yo estoy en el peor de los mundos. Pero como ya la realidad es que yo ya cumplí una etapa en mi vida; yo ya a los 73 años como dijo el doctor Petro en su discurso, yo hubiera preferido que lo hubieran soltado a ese viejito para que vaya a cuidar a sus nietos. El discurso de la Plaza de Bolívar. Y estoy seguro que va a tuitear en contra mía pronto, ¿por qué? porque el doctor Petro es obsesivo, es obsesivo”
Es bastante probable que, por sus crímenes, García termine privado de su libertad así se desgañite cada vez que puede cuestionando al presidente.